La llegada del central de 23 años Diego Llorente a Donostia es un hecho. Tras sendas cesiones en Rayo y Málaga, el Madrid se desprende del defensor por una cifra que estaría entre los 5 y 8 millones de euros –3 es el valor de mercado que le asigna la conocida web Transfermarkt–, según diferentes informaciones, y una opción de recompra. Era un secreto a voces que ya se confirma a falta de su oficialidad.

La Real se hace con un jugador pretendido por varios clubes, un defensor que en la temporada recién finalizada ha sido el tercero mejor de la Liga en la interceptación de pases del rival en campo propio, según los datos de Fútbol Avanzado, solo tras el rojiblanco Yeray y el valencianista Nico Pareja. De entre los datos estadísticos que podemos obtener de la Liga de Fútbol Profesional, Llorente R., como porta a la espalda, destaca que ha sido el 16º defensor que más duelos aéreos ha ganado, lo que apuntala el poderío defensivo de los de Eusebio Sacristán en esta faceta, pues Raúl Navas fue el 9º y su compañero de zaga Iñigo Martínez, el 11º; eso sí, el nuevo jugador realista ganó tantos duelos casi como los que perdió.

Números defensivos para un central que puede jugar también de pivote, como lo hizo en el tramo final de este curso en el Málaga de Míchel. En el Castilla llegó a hacerlo en ambos laterales también y fue Paco Jémez en el Rayo quien le reconvirtió a mediocampista, donde como se ve también se desenvuelve.

Atado y bien atado el futbolista madrileño es lo que se transmite desde todos los ámbitos, pero ayer seguía sin hacerse oficial su fichaje por parte ni de la Real ni del Madrid. Sería el primero de los de Sacristán, mientras otro posible es el rápido extremo Hirving ‘Chucky’ Lozano, internacional de 21 años, del Pachuca mexicano, según ha revelado su presidente esta misma semana, en pugna con Celta y PSV holandés.