Los partidos vascos representados en el Parlamento coincidieron ayer en Bilbo en la necesidad de reclamar más medidas institucionales y económicas de apoyo a la lectura y a la literatura en Euskal Herria. Fue en el debate que sobre política y literatura mantuvieron en Bilbo los parlamentarios Garbiñe Mendizabal (PNV), Miren Larrión (EH Bildu), Lander Martínez (Elkarrekin Podemos), Borja Semper (PP) y Rafaela Romero (PSE-EE).

Garbiñe Mendizabal afirmó que «se deben explorar otras alternativas a la ayuda económica. Hay que ver cómo ganar nuevos lectores porque aunque es verdad que hay que crear industria y ayudar a los creadores, si no tenemos público, no sabemos qué rentabilidad social va a tener».

Miren Larrión abogó por la figura del «creador integral» y porque la literatura «tenga un lugar en la política» y mostró su preocupación por el hecho de que el viceconsejero de Cultura, Joxean Muñoz, haya considerado que puede haber una edición «excesiva» de libros en Euskadi.

Lander Martínez, por su parte, mostró su preocupación por «la tendencia actual que existe de desproteger a la cultura de lo público y a dejarla en manos del mercado y que se empuje cada vez más a la literatura hacia un marco regulado por lo económico». Y Rafaela Romero pidió un cambio en la política cultural al considerar que «no puede ser la misma que teníamos hasta ahora fragmentada por territorios, municipios o con una concepción de cultura-museo».

Borja Semper, por último, considera que «el papel fundamental que deben jugar los poderes públicos es crear las condiciones para que se pueda crear en libertad, no de una manera dirigida, no para crear una identidad nacional, no para crear conciencia de clase» porque, en su opinión, «el dinero, por sí solo, no es garantía de éxito».