GARA
REAL

A la espera de que el Barça se decida a pagar y cómo

El club donostiarra ha rechazado que algún jugador azulgrana entre en la operación por Iñigo Martínez.

La Real no va a mover ficha. Y de momento el Barcelona no lo ha vuelto a hacer más allá de trasladar a la directiva donostiarra su interés por Iñigo Martínez. El hecho es que habrá que esperar para que lo que la mayoría da por hecho tenga algún desenlace en el sentido que sea. Al final, todo se reduce a una cuestión monetaria o, quizá, a la manera en la que abonar la cantidad establecida para el fichaje. Desde la entidad txuri urdin se ha dejado claro que la cláusula o nada y de ahí no se mueve. El Barça, en buena lógica, trata de abaratar la operación o camelar de alguna manera a la Real con la inclusión de algún jugador en el negocio. La Real ya ha dicho que nones, que el dinero contante y sonante, es decir, los 32 millones en los que está tasado el central.

Ambos presidentes han hablado por teléfono. Josep María Bartomeu trasladó a Jokin Aperribay su interés por hacerse con el jugador, el segundo se remitió a la cláusula. No quieren ningún jugador que han ofrecido para abaratar el precio, y ahora queda saber si una posibilidad de acuerdo puede residir en la forma de pago, es decir, que no se haga de una tacada.

Así están las cosas, el Barça no ha hecho más movimientos, en tanto el protagonista de la operación, el futbolista, parece que no está presionando al club y está dejando que las negociaciones fluyan de manera que su salida se enmarque dentro de la mayor normalidad y buen entendimiento. El ‘caramelo’ culé es demasiado apetecible para un jugador con el potencial de Iñigo Martínez y en puertas, no lo olvidemos, de un Mundial. El caso de Asier Illarramendi no está lejano en la memoria realista, aunque lo malo del central es que no tiene sustituto.

El cuerpo técnico de Eusebio Sacristán no se plantea que el recambio venga del filial y deberá buscar en el mercado en el que seguro ya se está manejando el club, donde poder traer a un defensa de garantías aunque no llegue al nivel del vizcaino. Según algunas informaciones, uno de los que interesan es un excompañero de Willian José. Se trata de Mauricio Lemos, central uruguayo de la UD Las Palmas. El jugador tiene una cláusula de 30 millones de euros y ya habría habido seguimiento realista por el defensor durante la pasada campaña.