El mundo asiste estupefacto al striptease antidemocrático español
En las redacciones de los principales medios internacionales ayer no había cosa más importante que lo que estaba ocurriendo en Catalunya. Todos informaron ampliamente sobre el referéndum, centrándose en la represión española contra ciudadanos inermes, una actuación que fue denunciada por dirigentes políticos y personalidades de la cultura.
Antonio Machado dejó escrito que «en España, de cada diez cabezas, nueve embisten y una piensa», y parece que en su Gobierno no hay nadie que forme parte de esa meritoria minoría. No puede haberlo si entre todas las opciones que tenía para afrontar la jornada optó por la más lesiva para sus propios intereses. En Barcelona había 1.500 periodistas acreditados, a saber cuántos sin acreditar, y ante todos ellos el Estado enseñó sus vergüenzas antidemocráticas. Desde la agencia china Xinhua hasta “The New York Times”, los medios informaron con cantidad de recursos gráficos y destacando la violencia empleada para impedir que Catalunya votara.
El diario neoyorquino hacía del referéndum la noticia más importante del área internacional, destacando la «extraordinaria muestra de determinación» de todas aquellas personas que acudieron a votar frente a las «amenazas del Gobierno de Madrid». Citaba también los heridos y señalaba, con una gran foto como acompañamiento, que las fuerzas policiales habían usado balas de goma. «La imagen no podría ser peor para el Gobierno central de España», resumía por su parte “The Washington Post”, que añadía que «las imágenes de la región separatista de Cataluña muestran a hombres y mujeres normales siendo arrastrados de las urnas por policías con cascos y vestidos de negro». Más gráfico y elocuente era la CNN, que hacía del 1-O su tema de portada y destacaba la «represión generalizada» de la Policía española.
También el británico “The Guardian” situaba a Catalunya como principal noticia, poniendo énfasis en la «violencia de la Policía española». Otro tanto ocurría con la BBC, cuya imagen de portada era la de un hombre trajeado siendo arrastrado por un policía. En el Estado francés, “Liberation” abría con este asunto y recogía declaraciones de votantes, como una mujer de 89 años originaria de Galicia que explicaba que acudía a ejercer sus derechos «por el futuro de mis nietos».
Merkel llama a Rajoy; Corbyn, Sturgeon y Michel denuncian
Parecidas palabras e imágenes podían encontrarse en el resto de cabeceras internacionales. Pero no sólo en los medios, la represión fue criticada por personalidades políticas y del mundo de la cultura. A última hora se difundió que la canciller alemana, Angela Merkel, habría llamado al presidente español tras constatar la existencia de numerosos heridos. Además, el líder laborista británico, Jeremy Corbyn, pidió a la primera ministra, Theresa May, a que llamara a Rajoy para instarle a una solución política, y denunció que «la violencia policial contra los ciudadanos en Cataluña es escandalosa». Por su parte, el primer ministro belga, Charles Michel, señaló que «la violencia nunca puede ser la respuesta», mientras la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, instó a Madrid a «dejar que la gente vote pacificamente». Y el presidente de Eslovenia, Borut Pahor, señaló que «hoy realmente muchos, muchos corazones eslovenos, laten a favor del pueblo catalán».
Del mismo modo, en su cuenta de Twitter el escritor escocés Irvine Welsh se preguntó, ante la represión española, «¿dónde narices está la UE?», e incluso J.K. Rowling, mundialmente conocida por ser la creadora de la saga de Harry Potter, se mostró «indignada» ante lo sucedido en Catalunya y calificó de «repugnantes» e «injustificables» las cargas.
El Barça juega a puerta cerrada en señal de protesta y reclamando democracia
Catalunya puede hacer alarde de ser conocida en todo el mundo por varios motivos, pero el Fútbol Club Barcelona es el embajador por excelencia de aquel país, con millones de seguidores en todo el planeta. Ayer el Barça, «més que un club», también se pronunció ante los hechos que estaban sacudiendo la sociedad catalana hasta los cimientos, aunque el modo en que lo hizo fue objeto de debate en su seno e incluso de dimisiones. Tenía partido por la tarde en el Camp Nou contra la U.D. Las Palmas, y en la Junta Directiva del club azulgrana estuvieron debatiendo la opción de suspender el encuentro; al final se habría impuesto la postura del presidente, Josep Maria Bartomeu, partidario de jugarlo. Sin embargo, el partido se disputó a puerta cerrada, sin presencia de público, en señal de protesta por lo que estaba ocurriendo en las calles de Catalunya. Bartomeu expuso que la Liga nos les aceptó el aplazamiento del choque e indicó que la decisión de jugar sin espectadores pretendía «dejar claro que en un momento excepcional hemos sido obligados a jugar este partido». Sin embargo, algunos de los directivos presentaron su dimisión por haber optado por jugar. Durante el partido, en el que los jugadores del U.D. Las Palmas lucieron una pequeña bandera española en su equipación, el videomarcador del estadio mostró en grande la leyenda «democracia».
También algunos jugadores del equipo de expresaron sobre lo ocurrido, como Gerard Piqué, que compareció emocionado tras el partido, criticó con dureza al presidente español, Mariano Rajoy, y que horas antes había acudido a ejercer su derecho al voto. «Juntos somos imparables defendiendo la democracia», tuiteó el central a primera hora. Otras leyendas recientes del Barça fueron igualmente contundentes en sus declaraciones. «Lo que está sucediendo hoy en Cataluña es una vergüenza, es inadmisible que en un país democrático la gente no pueda votar», dijo Xavi Hernández en un video difundido en las redes sociales, mientras que Carles Puyol escribió en su cuenta de Twitter que «votar es democracia». I. B.