Se mantiene el vaivén del Ibex. Ayer le tocaba subir y terminó, otra vez, por encima de los 10.200 puntos gracias al apoyo del sector financiero. ¿Ha cambiado algo en la situación de Catalunya? Nada. Los inversores, sin embargo, siguen esperando las decisiones de la Generalitat en este nuevo escenario, con el artículo 155 de la Constitución española en marcha y las distintas fuerzas catalanas analizando la respuesta a su ejecución.

Pero el foco de atención del día fueron los bancos españoles y sus resultados de los nueves primeros meses del año. Las cuentas de Caixabank (+0,91%) y Liberbank (+0,27%), con signo desigual, permitieron fijarse en la evolución de dos entidades que han protagonizado muchos episodios controvertidos. El banco presidido por Jordi Gual, que ha anunciado un traslado de su sede a València sin retorno, ganó 1.488 millones de euros, un 53,4% más, mientras que Liberbank registró una pérdida de 270 millones de euros. Esta última entidad trata de superar su débil situación gracias a una ampliación de capital de 500 millones y la protección de la CNMV, que ha prohibido posiciones cortas hasta el 30 de noviembre.

El Ibex, tras varios cambios de rumbo, acabó con un avance del 0,44%, hasta los 10.205,70 puntos. Por su parte, París sumaba un 0,15%, Fráncfort, un 0,08%, y Londres, un 0,03%. Los mejores del selectivo fueron Sabadell (+4,21%), Mapfre (+2,19%) y Santander (+1,53%). También apoyaron BBVA (+1,11%), Bankinter (+0,94%) y Bankia (+0,15%). Dentro de los perdedores, despuntaron Técnicas Reunidas (con -1,82%) y Merlin (-1,10%). En el Cac parisino, Essilor (+3,96%), el más alcista, confirmó sus objetivos para este ejercicio. Los títulos de Publicis (-3,05%) cosecharon la mayor caída.