Jon ORMAZABAL
Pelota

Oinatz Bengoetxea, a vueltas con la fascitis

El delantero de Leitza sigue arrastrando problemas en la planta del pie desde el pasado verano.

«¿Qué le pasa a Oinatz Bengoetxea?». Esa es una de las principales preguntas que ronda por la cabeza de los pelotazales en esta semana de ecuador de la competición, tan propicia para los balances. Tras dos años acumulando títulos y finales, extraña ver al de Leitza incómodo en la cancha, con poca chispa y sin esa clarividencia a la hora de terminar el tanto que había mostrado en los últimos torneos. Sin comentarios al respecto –no es el campeón Manomanista amigo de escudarse en excusas–, parte del misterio se desveló ayer, cuando no acudió a la cita con el cestaño en Larraintzar, donde mañana disputan un partido clave para sus aspiraciones ante otra pareja en crisis, la formada por Irribarria-Merino II. Es decir, tres de los cuatro finalistas de 2017 se miden mañana en Ultzama para seguir con vida en este Parejas.

Con la gripe azotando a diestro y siniestro –sin ir más lejos su compañero Larunbe no acudió a la elección de la semana pasada por un proceso febril–, se podía pensar que también había golpeado a Bengoetxea VI, pero lo cierto es que el delantero navarro no acudió a la cita con el cestaño, porque estaba tratándose de unos problemas que, no por conocidos, le están dando menos problemas en los últimos meses.

Desde verano

Y es que, la fascitis plantar que sufre el pelotari de Leitza no es nueva para él, sino que lleva arrastrándola, con mayor o menor intensidad, desde el verano. La fascia plantar es como una goma elástica que se suelta y contrae con el movimiento y la fascitis ocurre cuando esta parte del pie produce desgarros en los tejidos, generando dolor e inflamación en la zona.

Entre las razones más comunes de esta lesión está la sobrecarga por actividad física o deportiva, cosa que se da en el pelotari de Asegarce, que lleva un par de temporadas de lo más exigentes desde que se hizo con la txapela del Cuatro y Medio de 2016 en Gasteiz. Uno de los mejores remedios para la recuperación completa de este tipo de lesiones es el reposo, una opción que no ha barajado un pelotari que ha tratado de alargar su dulce momento de juego todo lo que ha podido.

Según cuenta, es una lesión que «cuando calientas bien no da problemas», que aparece en los partidos duros y sobre todo al entrenar. Hasta ahora ha ido llevándolo gracias a los masajes que le ha dado Bixente Artola.

La fascitis no es un mal ajeno a los pelotaris, ya que el propio Aimar Olaizola, ahora a nivel excelso, comenzó el Parejas con dudas tras superar un problema similar, que le impidió disputar la final de consolación del acotado ante el propio Oinatz. Acudir dos veces a Gasteiz para ser tratado con ultrasonidos y ondas de choque forman parte de la rutina del de Goizueta.

Zabaleta quiere «tomar las riendas»

El calendario del Parejas no es simétrico y a Ezkurdia-Zabaleta les toca arrancar la segunda vuelta ante Elezkano II-Rezusta, contra los que, en el día de Navidad en Eibar, jugaron uno de sus peores partidos hasta la fecha. Fue un duelo que les dejó huella y José Javier Zabaleta parece tener claro cómo no repetir.

«El partido del sábado será muy difícil. En la primera vuelta jugamos en Eibar y no estuvimos a la altura. El sábado tenemos que tomar las riendas y endurecer el partido, así es como nos suelen salir bien las cosas», apuntó.

Su transcurrir por la competición está siendo bastante desconcertante y buscan la regularidad. «En la primera vuelta, como pareja, estamos teniendo de todo; partidos desastrosos y otros en los que hemos podido enseñar nuestro nivel. En los dos últimos partidos hemos salido enchufados y a ver si podemos seguir en esa línea», explicó ayer en el Labrit el zaguero de Etxarren.J.O.