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REAL 2

La Real recupera definitivamente el ritmo. Tras arrancar 2018 con dos tropiezos consecutivos, las donostiarras reaccionaron en el tramo más complicado de su calendario, encadenando sendos empates con Atlético y Barcelona, para sumar después dos victorias consecutivas.

Con menos cartel pero igualmente meritorias. Si la semana pasada se imponían con contundencia al sorprendente Madrid, que sigue cerrando las posiciones coperas, ayer derrotaron a un Granadilla que aspiraba a cerrar la jornada en la tercera plaza. Pero los puntos volaron a Donostia, lo que permite al equipo de Gonzalo Arconada avanzar un puesto en la clasificación –es ahora décimo–, aunque su desventaja con el octavo puesto se mantiene en cinco puntos.

La Real hizo lo que le tocaba, aguantar primero, bien posicionada, el juego de un rival que llevó la iniciativa y buscó la portería de Mariasun Quiñones con más ganas que acierto. Y cuando lo consiguió –probaron Vatafu, Pisco, Dozono o Gavira–, se encontró con la guardameta hondarribitarra.

Con el paso de los minutos, las visitantes fueron llevando el partido a su terreno. Se hicieron con el balón y, si bien no generaron demasiadas ocasiones, evitaron que hubiera movimiento en su área. Y, además, acertaron. Primero fue Nahikari la que aprovechó un balón muerto en el área y, siete minutos después, Mendoza la que envió un zapatazo a la escuadra para dejar el choque sentenciado a poco más de diez minutos para el final.

El triunfo permite a las donostiarras superar al Espanyol, que cayó ante el Levante, aunque siguen por detrás del Rayo, que ganó al Sporting (3-1), y del Madrid, que no perdonó al Santa Teresa (2-1).