Raimundo Fitero
DE REOJO

Transistores

Está a punto de empezar la segunda temporada del programa de #0 “Radio Gaga”, un formato belga que se puede considerar una suerte de homenaje a la radio desde la televisión, pero que en la versión española tiene un equilibrio entre lo necesario, lo emocional, la denuncia, el humor y el documento. Y está perfectamente compensado todo debido a la aparente sencillez del formato, pero a su vez, a la frescura y capacidad del dúo de presentadores, dos cómicos, Quique Peinado y Manuel Burque, ambos con gafas, ambos con barba. Uno de Vallecas, el otro gallego, uno moreno zaíno y el otro pelirrojo, pero que tienen por un lado química, y por otro una suerte de inteligencia innata y capacidad para escuchar, de sentido del humor que va construyendo un mundo agradable, un relato muy trabajado. Repitieron el dedicado a la residencia de enfermos mentales en León, su primera entrega emblemática, porque se acercan a casos duros, con humanidad, sin una pizca de morbo. Esa furgoneta con remolque que se convierte después en estudio es un símbolo, y se acercan a lugares no habituales, a esos lugares de la sociedad que se esconden o se dejan apartados de las cámaras o los micrófonos del gran festival de la sociedad del supuesto bienestar.

Hay un magnífico trabajo de guion, producción y post-producción. El original belga es un éxito, aquí se ofrece en este canal de la plataforma de pago, pero merece la pena verse. Es una recomendación no gregaria, un impulso porque a veces se ven propuestas que justifican la existencia del invento, y en esta ocasión uno puede encontrar todos los elementos que así lo identifican: oportunidad, verdad, denuncia sin estridencia, solidaridad, y canciones dedicadas. Una radio que ya no es y se escucha con transistores en soledad o en lugares compartidos.