80 días han tenido que transcurrir desde los comicios para que Italia cuente al menos con un candidato a la Presidencia del Consejo de Ministros del país. Giuseppe Conte, profesor de derecho de 54 años sin experiencia política, ha sido el elegido por el M5S y la Lega para el cargo. Será Sergio Mattarella, el presidente de la República, quien avale o descarte la elección de las formaciones que recientemente han llegado a un acuerdo de Gobierno.

Así se lo hicieron saber Luigi Di Maio y Matteo Salvini, líderes del M5S y de la Lega respectivamente, a Mattarella, quien los recibió ayer por la tarde en el Palacio Quirinale, residencia oficial del presidente de la República. Fue el líder de los grillini quien oficializó la candidatura de Conte a primer ministro, aunque para entonces el nombre de éste ya abría las ediciones digitales de los principales medios del país.

Jurista y profesor –ejerce actualmente en la universidad Luiss de Roma y en la de Florencia–, Conte procede de la órbita del M5S. En campaña electoral fue propuesto como ministro en un hipotético gobierno liderado por Di Maio, y se dice que está detrás de la propuesta de abolir más de 400 «innecesarias» leyes. No obstante, nunca antes ha desempeñado una labor política.

«Nace la III. República»

En la rueda de prensa posterior al encuentro con Mattarella, Di Maio puso en valor el proceso de negociaciones llevado a cabo con la Lega: «Nos hemos centrado en las políticas y hemos dejado los nombres para el final». Reconoció que la elección de Conte puede resultar «inesperada», aunque subrayó que el nuevo Gobierno será de corte «político». «Hoy nace la III. República», proclamó.

Por su parte, la situación económica del país centró el discurso de Salvini. «Hay que hacer crecer la economía», reivindicó, para añadir que «no es posible que un 20% de los italianos tomen sicofármacos». Es habitual que el líder de la Lega acabe sus discursos con recados, y el de ayer fue a parar a la comunidad internacional: «En el nuevo Ejecutivo primarán los intereses de los italianos».

Mattarella tiene la última palabra

Aunque improbable, puede ser que el presidente de la República descarte la candidatura de Giuseppe Conte como primer ministro. Sergio Mattarella ha venido advirtiendo de que no aceptará un candidato de perfil bajo, y ahora está en sus manos decidir si éste cumple con sus expectativas. Si ve con buenos ojos la candidatura, la pelota pasará a estar en el tejado de las cámaras, que en última instancia votarán sobre la propuesta final.

Por el momento, Di Maio y Salvini se reservan un puesto en el nuevo Ejecutivo. Aunque en la jornada de ayer no se oficializó la formación del Gobierno, se especuló con que el líder de la Lega pueda hacerse cargo de la cartera de Interior, para así llevar a cabo su plan de deportar medio millón de inmigrantes. Se alzan más dudas sobre el cargo que ejercerá Di Maio, que ha sido colocado al frente tanto del Ministerio de Exteriores como del de Economía. En todo caso, será Mattarella quien determine la idoneidad de la composición del Ejecutivo, sobre la que también puede ejercer su derecho a veto. A. E.