Txisko Fernández
Periodista
IKUSMIRA

Con el horario cambiado

Por si a alguien se le había olvidado, desde el último domingo de marzo nos hallamos bajo el horario de verano. Y les adelanto que el último domingo de octubre habrá que volver a ajustarse al horario de invierno. Dos bruscos cambios en nuestros hábitos horarios que, conviene recordar, no obedecen a los deseos de la ciudadanía, sino a cuestionables tesis sobre el ahorro de energía en ciertos ámbitos; tesis que, además, han quedado obsoletas.

Cada vez les resulta más difícil a los «responsables gubernamentales» justificar este doble cambio anual y cada vez son más las personas que no quieren seguir el paso de esta, a mi juicio, absurda inercia. Es por ello que la Comisión Europea ha puesto en marcha una «consulta pública sobre la hora de verano» que tiene como objetivo recabar las opiniones de ciudadanas y ciudadanos de la UE, además de «las partes interesadas y los Estados miembros», en relación con las actuales disposiciones y «cualquier posible cambio al respecto». Para tomar parte en ella basta con entrar en https://ec.europa.eu/info/consultations/2018-summertime-arrangements y seguir unos sencillos pasos. El plazo está abierto hasta el 16 de agosto.

La propia consulta pone de relieve que hasta ahora, en este como en tantos otros asuntos de interés general, no se había tenido en cuenta la opinión de la ciudadanía. Y va siendo hora de cambiar este estado de cosas, hora de cambiar el forzado paso de la oca por un ritmo más natural. Va siendo hora de que no se nos imponga la hora a la que anochece y a la que amanece. Y ha llegado la hora de que dejemos de dar cuerda a tantas estúpidas «costumbres».