Gustavo Fernández Villate
Alcalde de Zalduondo
KOLABORAZIOA

La subida a Urbia en estado de ruina

Hoy es el día de San Ignacio. Centenares de alaveses y guipuzcoanos nos damos cita en las campas de Urbia para celebrar, invitados por la Parzonería de Gipuzkoa y Araba, una jornada de hermandad.

Decenas de vehículos transitan hoy por el camino de Zumarraundi, para antes de llegar a la plataforma de Urkilla, desviarse a la izquierda y adentrarse entre hayedos hasta llegar a los parajes de Urbia y Oltza.

Esta vez se encuentran con un camino en estado de ruina. Totalmente destrozado y prácticamente intransitable. Lo saben bien los senderistas, peregrinos y ganaderos que lo sufren todos los días.

Según datos proporcionados por la propia Diputación alavesa cerca de 36.000 personas pasaron por allí el pasado año 2017. La mayoría de ellas para visitar el Parque Natural de Aizkorri-Aratz, cuya entrada natural desde Araba debe pasar por ese camino.

La mayoría de este acceso está dentro del terreno propiedad del municipio de Zalduondo.

Han sido varios los intentos durante estos años para procurar un arreglo integral y duradero en el tiempo, que deje atrás soluciones parciales y parcheos, que se han visto inservibles y han supuesto un despilfarro del dinero público.

La respuesta ha sido decepcionante.

La Diputación de Gipuzkoa se ha escondido en el argumento de que el camino está situado en territorio alavés, olvidando que el único acceso a los pastos de Urbia, para personas y materiales es el citado camino y que la actividad económica generada por los pastores alaveses y guipuzcoanos, depende del estado del firme de esa vía.

Del Gobierno Vasco no sabemos nada, ni siquiera si es consciente de esta situación.

Con la Diputación de Álava hay contactos. En la última reunión mantenida nos propuso asumir un arreglo, repartiendo a partes iguales el costo de más de 450.000 euros, entre Diputación Foral de Álava, Parzonería de Gipuzkoa y Araba y Zalduondo junto con Asparrena, obviando las capacidades recaudatorias y económica de cada institución.

Los concejos y pequeños Ayuntamientos de nuestro Territorio Histórico saben de lo que hablamos. El coste que se nos quiere hacer asumir supondría no poder mantener una mínima actividad en el Ayuntamiento, supondría de facto echar la persiana y pedir que la propia Diputación asumiera su gestión, incluido el mantenimiento de nuestros caminos.

Para arreglar y mantener una infraestructura para que 36.000 personas puedan disfrutar del maravilloso entorno del Parque y para que ayude a generar riqueza en el sector primario y en el ámbito del turismo hace falta otra actitud, otro compromiso.

Zalduondo solo no puede.

Llegado este momento estamos determinados a restringir el tránsito por este camino y limitarlo únicamente a vehículos autorizados, intentando que el deterioro no progrese hasta que sea imposible transitar por él.

Si nadie lo remedia y sintiéndolo mucho en el 2019 en san Ignacio seremos menos.