A. G.
DELTECO GIPUZKOA BASKET

Después de la mejoría, deben llegar los triunfos

Pasito a paso, Delteco Gipuzkoa Basket va dando signos de mejora. Amén de los partidos ante Tecnyconta Zaragoza e Iberostar Tenerife que se escaparon cuando ya se cantaba victoria, el cuadro guipuzcoano ha ido creciendo en su juego, lo cual le permitió derrotar con claridad a todo un Gran Canaria y mantenerse vivo en la cancha del Obradoiro hasta los últimos segundos. Con esa premisa, los de Sergio Valdeolmillos afrontan el partido de la octava jornada que tendrá lugar en Illunbe ante San Pablo Burgos a las 20.30.

«No estamos mal, hemos hecho buenos encuentros últimamente tanto en casa como fuera y la línea es buena», admitió en rueda de prensa Valdeolmillos, quien es consciente de que el calendario se endurece y que ganar en casa a un rival que hace dos años estaba en la LEB Oro es necesario. El preparador nazarí apostilló que «ante San Pablo Burgos hay que ganar sí o sí».

El preparador andaluz se mostró optimista por cómo gestiona su plantilla el hecho de que en estos momentos, y desde hace varias semanas, Delteco Gipuzkoa Basket ocupa el farolillo rojo de la Liga ACB.

«Veo bien al equipo y creo que saben manejar y convivir en estas situaciones», subrayó Valdeolmillos, que consideró que la línea de juego implantada es la correcta y que hay que mantener la confianza en su propuesta. Así, achacó los malos resultados de su equipo por sus «bajones en momentos concretos de juego», al tiempo que apeló a su «defensa» para parar el cuadro castellano.

«Ellos tienen una plantilla con muchos jugadores y además de calidad, por lo que nosotros tendremos que oponer una buena defensa para que se imponga a su ataque», concluyó el preparador granadino.

Rivales en la grada

Habrá que ver qué aspecto tiene Illunbe. Los menos de 1.800 valientes que fueron al último partido le dieron un aire muy desangelado.

Es posible, por otro lado, que a cuenta de la cercanía, el propio San Pablo Burgos movilice a parte de su afición, llegándose a la paradoja de que haya en la grada casi tantos aficionados del bando visitante que del local.