La Real se encuentra con el problema de tener tres porteros de primer nivel con contrato para la próxima temporada, a falta de la confirmación oficial de un fichaje de Alex Remiro que se ha convertido en un error porque obliga a desprenderse de uno de los tres este verano.

El acuerdo con Remiro se pudo producir cuando Kepa aún estaba en el Athletic y el navarro no quería seguir en un equipo en el que tuviera el camino a la titularidad tan cerrado. Llegaba también después de una temporada complicada en la portería de la Real, en la que se tuvo que fichar a Miguel Ángel Moyá después de que Gerónimo Rulli y Toño Ramírez fueran los grandes perjudicados de los problemas que trasmitía el equipo.

Atar libre a un jugador con un año de antelación se ha convertido en un problema porque la marcha de Kepa al Chelsea, la lesión de Herrerín y la negativa de Remiro a renovar por el Athletic dejó en evidencia al portero navarro, que se ha pasado toda la temporada en blanco porque, pese a levantar el nuevo presidente Aitor Elizegi el veto que le puso Josu Urrutia, solo se vistió en el partido de Anoeta.

La mejor versión de Rulli

La llegada de un portero que todavía no ha debutado en Primera tras una temporada en blanco y que pretendía solucionar el problema de la portería del año pasado va a coincidir con el mejor nivel de Rulli desde que llegó a la Real. Así lo demostró en Mendizorrotza, donde estuvo muy seguro en todos los balones aéreos, su mayor déficit en la fase en la que ha trasmitido inseguridad y desconfianza, y muy acertado en todos los balones enviados a su portería.

Tampoco es una gran sorpresa el nivel que da ahora Rulli porque desde que llegó sorprendió la tranquilidad, confianza y seguridad que trasmitía. Perdió esas virtudes la pasada temporada y ese recuerdo le perjudicó en el comienzo de ésta, pero con la llegada de Imanol desde enero ha dado un nivel espectacular, ha confirmado su categoría y se ha convertido en un jugador clave para sostener un equipo mermado por las bajas.

Ha conseguido algo difícil en un portero, que siempre encaja goles, que hasta los que escribían que era un chiste que jugara ahora reconocen su nivel. Es mucho más portero que Remiro, pero en lugar de defender que los mejores se mantengan en la plantilla se ha publicado que la Real va a traspasar al argentino para quedarse con Remiro y Moyá. Además, la Real ha fichado a un portero ecuatoriano de 18 años, Moisés Ramírez, cuando es la posición mejor cubierta con el argentino, que tiene 26, y contrato hasta 2022.

Moyá tiene 35 años recién cumplidos y un año más de contrato y es el portero suplente ideal porque además de su buen nivel tiene la veteranía y la personalidad que agradece una plantilla tan joven. Y Remiro, con sus 24 años, no ha firmado para ser suplente. Un problema en el que se ha metido la Real por no tener en cuenta que en el fútbol todo cambia en unas semanas y lo que hace un año podía tener su lógica ahora es un error que no debe llevar a la Real a desprenderse de uno de sus jugadores mejores.

La derrota del Athletic da la razón a Imanol

La derrota del Athletic en Valladolid deja a la Real a tres puntos y con average a favor de la séptima plaza que ocupa el equipo rojiblanco y que permitirá disputar las previas de la Europa League. Eso da la razón a Imanol, que hasta en la peor racha de la temporada de una victoria en diez partidos ha mantenido viva la llama de la esperanza europea. El viernes se marcó el objetivo de la séptima plaza y de ser el mejor equipo vasco al final de la Liga y la victoria en Mendizorrotza permite llegar a la penúltima jornada con opciones, igualada a puntos con Espanyol, con el que juega en la última en Cornellá tras ganarle en Anoeta, y con el Alavés, con el average general igualado y el general favorable.

La Real apurará el domingo sus opciones a la séptima plaza con un Real Madrid que sigue con su casting para la próxima temporada y ayer ganó por 3-2 al Villarreal con un once atípico formado por Courtois; Carvajal, Varane, Vallejo, Marcelo; Casemiro, Valverde (Isco, m.62), Kroos; Lucas Vázquez (Marco Asensio, m.62), Brahim (Vinicius, m.74) y Mariano, que metió dos de los tres goles y Vallejo el otro.

Para este partido Imanol podrá recuperar a Adnan Januzaj, que participó con total normalidad en el entrenamiento de ayer en Zubieta, en el que no llegaron a saltar al césped dos de los tres sustituidos el sábado en Gasteiz, Aritz Elustondo y Luca Sangalli, como Zurutuza, Illarramendi y Rulli. Aihen Muñoz y Ander Barrenetxea, recuperado del problema que le hizo ser cambiado, fueron los únicos jugadores de campo del Sanse que se entrenaron con el primer equipo y al jugarse la permanencia el fin de semana ante el Arenas el resto se centrarán en el filial esta semana. La Real descansa hoy y mañana y el miércoles a las 11:00 volverá a Zubieta para preparar desde el jueves a puerta cerrada el partido del domingo en Anoeta contra el Real Madrid (18:30).

Januzaj se ha perdido por lesión los últimos siete partidos desde que jugó el 31 de marzo en Valladolid y se ha llegado a cuestionar sus dolores. Imanol no lo hizo, pero dijo que deberá ganarse el puesto como los demás.J.I.