ARTOLA 9

LASO 22

Dudar no es una opción para un Unai Laso que se estrenó en la liguilla de cuartos con una convincente victoria, incluso más amplia de lo esperado, ante un timorato Iñaki Artola que se quedó sin respuestas y se ha complicado mucho su pase a semifinales tras no encontrar su sitio ayer en Altsasu. El irregular Burunda esperaba un duelo equilibrado entre dos pelotaris con ciertas similitudes físicas, pero que se rompió por la antagónica forma de afrontarlo de uno y otro contendiente.

Quizá porque no tenga otra forma de jugar, pero el delantero navarro entró al partido a calzón quitado, dando un paso adelante en cada pelotazo y buscando el remate a la primera oportunidad. Por contra, Iñaki Artola prefirió confiar en su poder a bote y el paso lo dio hacia atrás, cediendo toda la iniciativa a su rival, que es de los que juega sin retrovisor.

Y si lo hubiera tenido, hubiera descubierto a un Artola tímido ya desde el resto, sin respuestas a la ofensiva de un Unai Laso que, además, se mostró acertado en un comienzo en el que enseguida se adelantó 2-6.

El saque como castigo

Para colmo de males, el saque, la herramienta principal para cambiar las dinámicas en los duelos individuales, se convirtió en un suplicio para el de Alegia desde que cometió una falta en el cuarto que probó. Terminó con hasta cuatro faltas, mientras que el resto –encajó siete saques directos– se convirtió en otra rémora.

Así que, con un Laso que apenas se permitió un par de despistes y un Artola lejos de su nivel, el navarro ventiló el partido en apenas 139 pelotazos.