31 OCT. 2019 Entrevista JOKIN AZKETA ESCRITOR «He querido escribir sobre la dificultad para conocer la verdad» En su última novela, «El tiempo del vacío», el escritor iruindarra continúa con sus historias de intriga montañera, en esa ocasión con una novela ambientada en el Pirineo, escenario de varias e inexplicables desapariciones. Patxi IRURZUN “El tiempo del vacío”, publicada por Desnivel, es la tercera novela del escritor y montañero navarro Jokin Azketa, tras “Donde viven los dioses menores” y “Lo que la nieve esconde” (finalista la primera del Premio Desnivel en 2011 y ganadora la segunda del mismo en 2013). Con ella Azketa apuntala un subgénero con sello propio, el thriller montañero, al que añade en esta ocasión aportaciones de carácter histórico (sobre el montañismo en general y figuras del pirineísmo en particular) y una novela con trazos psicológicos, que se adentra en la mente de un asesino en serie. La novela es además una pequeña guía por algunos de los paisajes más panorámicos de los Pirineos. ¿Se puede decir que usted es el inventor o al menos uno de los principales representantes del thriller de montaña? No lo sé, si no lo soy me gustaría serlo. Sí que es cierto que yo estoy buscando una manera personal de escribir novelas de montaña alejándome del género clásico y de ahí es de donde salen estas mezclas, de historia del montañismo, o del pirineísmo en este caso, con tramas criminales. Pero tampoco sé si acabo de entrar del todo en lo que es novela negra o el thriller, porque, aunque hay un investigador, tampoco se trata de una trama policial, no sé, son cosas que quizás deberían juzgar otros. En todo caso sí que podemos decir que, por ejemplo, «El tiempo del vacío» es más que una novela negra o un thriller, que hay otros componentes, como las referencias históricas o al montañismo… En cuanto a la trama histórica, en la novela hay una serie de tramas que tiene que ver con la ocupación nazi de Francia y por tanto también de los Pirineos, y es cierto, por ejemplo, que, no sé sabe muy bien por qué, hubo dos capitanes nazis que ascendieron al Elbrús, la principal cumbre del Cáucaso; y eso enfadó a algunos capitostes nazis, como Hitler, pero otros como Goebbels lo vieron como una gran baza propagandística; pero es, por ejemplo, inventado que uno de los dos capitanes estuviera destinado en Pau después de esto. Es cierto también que los nazis requisaron algunas estatuas en los Pirineos, como la del conde Russell, pero no que, como sucede en la novela, tuvieran ningún interés en secuestrar su cadáver… Yo, en definitiva, me he servido de todo eso para crear ciertos enigmas y que estos me dieran pie a hablar de todos estos personajes reales. El conde Russell, por cierto, hay quien dice que inspiró a Julio Verne el personaje de Phileas Fogg… No está demostrado, pero sí fue un hombre polifacético, músico, escritor, recorrió el mundo, regiones remotas… Así que es muy posible. Toda la novela se sostiene sobre una historia de intriga, la presencia de un asesino en serie en los Pirineos, no sé si se puede contar algo sin destripar nada. Se puede, sí. Yo creo que el libro, primero, puede ser una guía para recorrer lugares especialmente panorámicos del Pirineo. Panorámicos, pero también vertiginosos. Y en estos sitios empiezan a ocurrir una serie de extraños accidentes, porque aunque son lugares con grandes patios o caídas, son a la vez también muy fáciles de recorrer, así que una persona de la federación de montaña se empieza a extrañar y comienza a investigar. Pero, en realidad, de lo que yo he querido escribir es de la dificultad, en general, para conocer la verdad; de la sensación de peligro y los modos en que cada cual reacciona ante él; o de la destrucción acelerada de la naturaleza. Esto último tiene bastante que ver con la trama. Sí, porque uno de los personajes principales vive esa defensa de la naturaleza de un modo enfermizo, a ultranza, lo cual se mezcla además con algunas obsesiones personales, su profunda soledad, sus dificultades para establecer relaciones, una historia familiar dura… El libro, es en ese sentido, también un libro con retratos psicológicos muy potentes, para lo que además usa diferentes voces narrativas. ¿Ha sido complicado para usted? Quizás eso haya sido lo más complicado, sí. Este libro no tenía mucha planificación previa, porque inicialmente solo tenía una idea muy esquemática (algunos lugares del Pirineo y unos accidentes inexplicables en ellos), y a partir de ahí me puse a escribir. Eso tiene la ventaja de la espontaneidad y de la emoción, porque ni siquiera yo mismo sabía qué iba a suceder, pero otras veces te deja un poco cojo, o te detiene en algunos puntos o callejones sin salida, y eso quizás ha sido lo que hizo que surgieran esas diferentes voces o puntos de vista. ¿Habrá una cuarto thriller de montaña de Jokin Azketa? Sí que me gustaría. De momento, ya empiezo a ver algunos lugares, personajes y situaciones, de una forma todavía no muy clara, pero esa es la manera en que comienzan a formarse en mi cabeza las historias, así que creo que sí, que se puede decir que habrá una cuarta novela. ESPONTANEIDAD«No tenía mucha planificación previa, porque inicialmente solo tenía una idea muy esquemática, y a partir de ahí me puse a escribir. Eso tiene la ventaja de la espontaneidad y la emoción, porque ni siquiera yo sabía qué iba a suceder» BÚSQUEDA«Estoy buscando una manera personal de escribir novelas de montaña alejándome del género clásico y de ahí es de donde salen estas mezclas, de historia del montañismo, o del pirineísmo en este caso, con tramas criminales»