Pablo Urtasun (Urdiain, 1980) se ha estrenado en la concentración realizada desde el jueves hasta ayer en Orkoien como director del Kern Pharma, donde coincidirá con Juanjo Oroz como lo hizo como corredor en el Caja Rural amateur, Kaiku, Euskaltel Euskadi y en el proyecto de Pino Road que fracasó. Tras retirase en 2016 con el Funvic, empezó su etapa como director en el Ukyo japonés (2017-18) y, tras un año alejado del ciclismo, vuelve al pelotón ilusionado.

Urtasun explicaba ayer a GARA que «el año que dejé de ser director en Ukyo me moví para buscar un salida en Europa. No salió, empecé a trabajar cerca de casa, te haces a otro estilo de vida y cuando me amoldaba a eso me llamaron Juanjo y Manolo. Cuando vas a volver a lo que te gusta y a lo que ha sido tu vida, todo es más fácil y más con un proyecto como éste. La experiencia me demuestra que la categoría continental solo podía ser de paso. Con el nivel del calendario sub’23 vasco y las vueltas que hay en España no tiene mucho sentido ser un continental salvo que seas filial del World Tour. La idea es pasar a la segunda categoría el año que viene, lo atractivo es la idea de crecer a largo plazo, que esto no va a ser una historia de un año o dos».

Destaca su amistad con Oroz: «Cuando acabó Kaiku en setiembre nos fuimos de vacaciones juntos con nuestras parejas. Estábamos en la calle y nos fuimos los cuatro pensando que si nuestra aventura había acabado nos despedíamos a lo grande y cuando volvimos Juanjo fichó por Orbea y yo por Liberty. Desde cadetes nos hemos pegado dentro de la carretera, pero fuera hemos sido amigos toda la vida y eso ha sido determinante».

Responsabilidades compartidas

Por eso ni han hablado del reparto de responsabilidades, aunque entiende que Oroz «va a tener otras muchas funciones. Tanto las tácticas como las alineaciones serán consensuadas, pero hay que cuidar a los sponsors, hacerles sentir parte del proyecto y ésa será una de las labores de Juanjo. Tanto él como Manolo Azcona tienen don de gentes y valen para eso. Te juntas con cualquier ciclista que ha pasado por sus equipos y nadie habla mal de Manolo. Eso es por algo. Su cariño queda por encima de decisiones deportivas».

Su mayor preocupación es buscar un buen calendario: «Estamos moviéndonos para cerrar toda la infraestructura y el calendario, que no es fácil. Las organizaciones tienen asegurada la participación de equipos World Tour y procontinentales y esperan a última hora para confirmarte una invitación. Me habría gustado en la primera concentración tener muchas cosas cerradas y dar una guía, pero aún estamos cerrando cosas. Arrancaremos con un gran calendario y a ver si cerramos todos los días que queremos».

Ser un proyecto joven y nuevo les permitirá «moldearlo entre corredores, directores y auxiliares. Lo vamos a llevar por el camino que queramos. Si llegas a un equipo consolidado con una manera de trabajar que no te gusta tienes que adaptarte. Aquí lo vamos a construir día a día con ilusión y con trabajo. Ayer estuvimos Juanjo y yo con todos los corredores y las palabras que más se oían eran muchas ganas e ilusión. Son gente muy joven con muchas ganas de arrancar y mejorar. Son jóvenes que lo han hecho muy bien en amateur y tienen un premio merecido. Y hemos visto el nivel de Castrillo, Berrade y Sanz... Hemos tenido muchísima suerte de formar una plantilla con futuro para ilusionarse. Si crecen como lo han hecho hasta ahora seremos un buen equipo. Deben aprender mucho y dejarse guiar».

El objetivo de la primera concentración que acabó ayer fue «juntarnos todos y conocernos, crear ambiente, probar algunos materiales y ropas, coger tallas. En diciembre estaremos con bicis en el Sur con la intención de hacer entrenamientos largos. Tendremos hasta mayo un bloque muy bonito de carreras y queremos empezar bien».