Vuelan los cuchillos entre Madrid y Gasteiz, entre la calle Génova y la dirección del PP de la CAV. El secretario general de los de la gaviota, Teodoro García Egea, suscribió ayer con el secretario de Finanzas de Ciudadanos, Carlos Cuadrado, el acuerdo de coalición para las elecciones del 5 de abril en la CAV.

Todo ello sin la participación, incluso con la oposición declarada, del partido en la CAV y de quien había sido designado candidato, Alfonso Alonso, a quien no se menciona en el texto, que establece que corresponde al PP la elección del aspirante a lehendakari y reserva dos puestos de salida para la formación naranja.

El exministro de Sanidad recibió el jueves por la noche un mensaje de Ana Beltrán, vicesecretaria de Organización del PP, en el que se le conminaba a viajar a la capital del Estado español para rubricar el pacto a las once de la mañana.

Alonso respondió que no podía acudir y que solo conocía el contenido del acuerdo por lo publicado en los medios de comunicación, ya que él no había tomado parte en la negociación.

El secretario de Acción Institucional de Cs, José María Espejo-Saavedra, aseguró el jueves que sus candidatos ocuparán el segundo puesto en las listas por Araba y Bizkaia, mientras que otros puestos estarían pendientes de negociar. El PP de la CAV salió rápidamente al paso para desmentir esta posibilidad y tildarla de «inasumible», porque «no guarda relación con la realidad de cada partido aquí».

El pasado noviembre, Ciudadanos obtuvo un pírrico 1,11% de los votos (13.058) en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Pero sumó un sabroso bocado del 6,8% en el conjunto del Estado español, 1.637.540 papeletas que desde Génova quieren atar en corto. A ello cabe sumar las pugnas internas del PP. Los de naranja se frotan las manos, ya que por sí solos no rascarían bola.

«Queda tiempo»

Tras el plantón matinal de Alonso, desde Madrid se anunció que la firma tendría lugar por la tarde. Fuentes de la dirección autonómica replicaron con rapidez: «No reconocemos ningún acuerdo», sentenciaron.

Aseguraron que no se trata de «una pelea por repartir dos puestos», sino que reivindican «la historia del PP vasco (...), que se ha defendido con mucho sufrimiento». Después del acto, afirmaron en Twitter que «queda tiempo para ajustar» el acuerdo al proyecto «que lidera el PP vasco en nuestra tierra» y porteriormente anunciaron que lo analizarán el lunes.

La expectación se centra ahora en ver qué postura adoptará Alonso respecto a su candidatura, si aceptará este trágala o si renunciará a encabezar una coalición impuesta.

Pablo Iglesias cierra la puerta a Equo Berdeak

Antes de las elecciones estatales de noviembre pasado, el 58,7% de la afiliación de Equo decidió romper su coalición con Unidas Podemos y presentarse junto a Más País, el partido encabezado por Iñigo Errejón. Un cambio que generó discrepancias en el bando ecologista.

Referentes como su cofundador Juantxo López de Uralde o Rosa Martínez, ahora aspirante a lehendakari, dejaron el partido. Equo Berdeak, su rama en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, se desmarcó y mantuvo su trabajo conjunto con Podemos Euskadi e Izquierda Unida-Ezker Batua (IU-EB).

Una alianza a tres bandas que, bajo la denominación de Elkarrekin Podemos, iba a repetirse el 5 de abril. Las bases ya habían refrendado repetir la coalición y se había puesto en marcha el proceso de primarias para elegir quién sería el titular del «escaño verde que hasta la fecha ha ocupado José Ramón Becerra». Pero el jueves llegó la sorpresa, cuando, según anunció ayer Equo Berdeak, recibió una comunicación de Podemos Euskadi notificándoles que desde la dirección federal de Madrid habían rechazado el acuerdo y que era «una decisión imposible de cambiar».

«Nos vetan sin más explicaciones», lamentó Becerra, para quien se trata de «un error político grave» que cercena «un proyecto vasco y vasquista, con autonomía propia». El partido analizará «este nuevo escenario» el 29 de febrero.

Al mismo tiempo, el secretario general de Podemos Euskadi, Lander Martínez, y la coordinadora general de IU-EB, Isabel Salud, registraban la coalición Elkarrekin Podemos-IU, con la que concurrirán juntos a estas próximas elecciones autonómicas.GARA