Joseba ITURRIA
DERBI EN EL REALE ARENA

Dos estilos de juego que invitan a esperar un encuentro espectacular

Real y Osasuna se miden por sexta vez esta temporada tras tres amistosos y dos partidos oficiales en los que se marcaron once goles.

Real y Osasuna retoman esta noche la competición liguera con su sexto partido de la temporada. La cercanía y la buena relación entre los dos clubes les han llevado a organizar tres amistosos y el equipo blanquiazul ganó en El Sadar (3-4) en Liga y en Copa en el Reale Arena (3-1), con lo que Imanol y Arrasate y sus jugadores se conocen perfectamente y volverán a medirse con la intención de imponer cada uno su estilo de juego.

Imanol dijo antes del partido de Liga que por la forma de jugar de los dos equipos seguro que iban a verse goles y acertó de pleno. Los once tantos en los dos partidos oficiales invitan a pensar que esta noche se viva un duelo espectacular con un equipo de Osasuna que acudirá a presionar a una Real que tampoco ha tenido problemas para evitarlo con un juego directo cuando lo ha visto necesario.

Esa será una de las incógnitas de un partido en el que la Real podrá contar con todos sus jugadores menos los lesionados Sangalli y Guevara, con la vuelta de Illarramendi por vez primera a una convocatoria nueve meses y medio después de su lesión en San Mamés el 30 de agosto. Lo que en un principio parecía una fractura de peroné se complicó con otras lesiones en el tobillo en el ligamento deltoideo y en la sindesmosis y el parón le ha permitido llegar al final de temporada, como a Zurutuza. Junto a los jugadores disponibles del primer tiempo –el tercer portero Andoni Zubiaurre fue el único descarte–, Imanol convocó a los jóvenes del filial Pacheco, Zubimendi y Roberto López.

Arrasate llega al partido con más bajas, pero ha podido recuperar a Roncaglia y el exrealista Fran Mérida y además convocó a los jugadores del filial Xabier Oroz y Javi Martínez.

«Un derbi sin gente no es nada»

El partido estará marcado por la falta de público cuando en condiciones normales el ambiente iba a ser espectacular porque el nuevo Anoeta lo es y además la afición rojilla se habría acercado en masa a apoyar a los suyos. Bultzada, el motor de la ambientación de Anoeta, transmitía en un comunicado en el que también aparece la firma de los Indar Gorri que «el fútbol sin la gente no es nada, un derbi sin sus aficiones no es nada».

Habrá que ver cómo influye la falta de ambiente en el partido y los cinco cambios, que dan más opciones al que más calidad tiene, en este caso una Real con muchas opciones ofensivas.

 

Imanol: «Todo será raro al jugar sin aficionados»

La Real quiere reforzar su cuarta plaza tras la derrota del Getafe y el empate del Valencia con un partido en el que para Imanol, según declaraba el viernes, «todo será raro al jugar sin nuestros aficionados. Ha sido algo muy importante el ambiente de Anoeta, pero jugaremos con las mismas ganas e ilusión sabiendo que acabamos muy bien antes del confinamiento. Jugadores y aficionados queremos mantener la cuarta plaza. Son muchos puntos, el rival es duro, y todos los partidos nos los tomaremos como finales».

Sobre Osasuna, Imanol destacó que «nos conocemos muy bien. Ellos tienen claro cuál es su estilo de juego y nosotros también. Habrá pocas sorpresas. Intentarán hacer su partido presionando arriba, con la línea defensiva muy alta, y nosotros intentaremos buscar los espacios y superar su presión. El que acierte tendrá que hacer méritos para sacar los tres puntos». J.I.

 

Arrasate: «Sin intensidad, no somos nada»

Expectante por comprobar sobre el césped y contra un rival qué imagen va a ofrecer su equipo en esta vuelta a la competición, el técnico rojillo, Jagoba Arrasate, es consciente de que los suyos, «sin intensidad y ritmo, no somos nada», de ahí que la idea es volver cuanto antes a su estilo de juego.

Una fórmula que, ante la Real, consistirá en tratar de «minimizar» las virtudes del contrincante, «que son muchas», aunque también buscando cómo «hincarle el diente». «Necesitaremos nuestra mejor versión y no encajar tantos goles ante ellos», recordó.
La meta rojilla es sumar cuanto antes dos victorias que le darían a la escuadra rojilla la seguridad matemática de continuar en Primera, al llegar a los cuarenta puntos. «Si ponemos el cuatro por delante, tendremos el objetivo prácticamente conseguido, pero esos puntos no nos van a caer del cielo», indicó. N.M.