La cifra de ingresos se dispara en el sistema hospitalario y Lakua ya no descarta nada

El sistema sanitario de Hego Euskal Herria atiende a 680 personas enfermas de covid-19, después de que el lunes se produjeran 79 ingresos. El aumento de los contagios está generando presión en los hospitales y la evolución pandémica no da tregua, con nuevo récord en Nafarroa y Gipuzkoa en zona roja. Lakua ya no descarta ninguna medida.

El lunes se produjeron 79 nuevos ingresos en Hego Euskal Herria, una cifra que empieza a evocar los peores momentos de la pandemia. Aunque aún no alcanza las cotas de la primavera, las 34 hospitalizaciones reportadas por el Gobierno de Iruñea duplican las que se produjeron a finales de la semana pasada, entre 15 y 18 de viernes a domingo, y los 45 nuevos pacientes de Osakidetza constituyen el número más alto desde principios de setiembre, y son tres veces más que solo una semana antes.

De esta forma, el sistema hospitalario atiende a 680 enfermos de covid, de los que casi un centenar, 97, están en las unidades de cuidados intensivos, por 537 en planta y 46 en hospitalización domiciliaria. Igual que ocurre con la cifra de positivos–578 el lunes, nuevo récord–, también en este caso Nafarroa se lleva la peor parte en proporción al número de habitantes, con 309 pacientes, 38 en las UCI, pero la evolución de la CAV en los últimos días es preocupante.

Así, entre el día 9 y el 19 de este mes, el número de camas hospitalarias ocupadas en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se ha incrementado en 90, de 281 a 371, y las UCIs han pasado de 45 a 59.

Gipuzkoa entra en «zona roja»

Este incremento es consecuencia del deterioro de la situación epidemiológica, con una incidencia acumulada en 14 días de 373,95 casos por 100.000 personas en el conjunto de la CAV, con Gipuzkoa ofreciendo los peores datos. Con 304 nuevos casos y una incidencia de 506,14, ese herrialde ha entrado en «zona roja», donde también se encuentran dieciséis municipios: Astigarraga, Azkoitia, Azpeitia, Beasain, Deba, Eibar, Elgoibar, Hernani, Lezo, Oñati, Ordizia, Pasaia, Tolosa, Urnieta, Zumaia y Zumarraga. Son dos más que el día anterior, y la portavoz de la Diputación de Gipuzkoa, Eider Mendoza, admitió ayer que observan con «mucha preocupación» lo que está ocurriendo.

El diputado general, Markel Olano, mantuvo a la tarde una reunión telemática con 60 alcaldes y alcaldesas para analizar la evolución de la pandemia, y Osakidetza realizará a partir de hoy un cribado masivo en Ordizia y en Zaldibia, al que están llamados los vecinos y vecinas de ambas localidades que tengan entre 13 y 40 años de edad.

Aunque al contar con menos de cinco mil habitantes –tiene 1.630– no aparece marcado en color, Zaldibia alcanzaba en el informe de ayer una incidencia acumulada de 2.269,94 casos.

«Cambiante e inesperada»

Gipuzkoa presenta por tanto los datos más inquietantes, pero la evolución de la CAV, que estuvo varias semanas reduciendo contagios y hospitalizaciones, es mala en conjunto, hasta el punto de que el portavoz del Gobierno de Lakua, Bingen Zupiria, reconoció que no se descarta ninguna opción ante una realidad que calificó de «cambiante, desconocida e inesperada».

En rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, Zupiria dijo que el Ejecutivo tratará de evitar, «en la medida de lo posible», tener que volver a recurrir a una medida «tan dura» como un confinamiento general, aunque insistió en que «están abiertas todas las posibilidades» y señaló que analizan «día a día» y municipio por municipio la evolución.

En este sentido, destacó que los datos son distintos en cada territorio e incluso en cada unidad asistencial, por lo que las decisiones que puedan adoptarse podrían afectar a la CAV –como las medidas aprobadas el sábado pasado–, a un herrialde o solo a determinados municipios u organizaciones sanitarias.

En el caso de las medidas anunciadas el fin de semana, entre las que se incluye la limitación a seis personas de las reuniones sociales y la reducción de aforos al 50% en toda la hostelería (salvo terrazas), recordó que Lakua está a la espera del visto bueno del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco para publicar la orden que las recoge.

Aval de la Fiscalía

Precisamente, la Fiscalía Superior del País Vasco trasladó ayer a la sala de lo Contencioso Administrativo del TSJPV su aval a la limitación de las reuniones a un máximo de seis personas, al entender que la medida «es proporcional y acorde» a la necesidad de impedir la expansión del covid-19, según indicó a Efe la fiscal superior, Carmen Adan.

Tras recibir el escrito del Ministerio Público, la sala de lo Contencioso Administrativo tiene dos días para reunirse y dictar un auto al respecto, de manera que en principio mañana se conocerá esa notificación. Si el tribunal avalara su legalidad las medidas podrían entrar en vigor el próximo fin de semana.