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Victoria de Arauz con un disputado segundo puesto

El candidato de Unión por la Esperanza (UNES), movimiento del expresidente Rafael Correa, venció con casi un tercio de los votos en las elecciones presidenciales de Ecuador, pero su rival en la segunda vuelta sigue en el aire, dada la mínima diferencia entre el candidato indigenista Yaku Pérez y el derechista Guillermo Lasso. Ambos reclamaron el segundo lugar, y Pérez se refirió incluso a intentos de fraude. El resultado oficial puede tardar aún días.

Con el 32,15 % de los votos válidos, el correísta Andrés Arauz ganó las elecciones presidenciales celebradas el pasado domingo en Ecuador, según los datos oficiales parciales, un resultado que confirmó el que habían avanzado las encuestas.

Pero en la disputa del segundo puesto, a falta de escrutar apenas el 2% de las actas, la diferencia seguía siendo mínima entre el candidato indigenista Yaku Pérez y el derechista Guillermo Lasso, que partía como favorito para pasar a la segunda vuelta, que se votará el 11 de abril.

Pérez, del movimiento Pachakutik, obtenía el 19,87% del escrutinio, en tanto que Lasso, del movimiento CREO estaba en 19,6%, poco más de 15.000 votos de diferencia en favor del candidato indigenista.

Y aún faltaban por solventar actas que presentaban alguna novedad, procesar las pendientes y contabilizar todo el voto de la diáspora, algo más de 410.000 ecuatorianos que viven en el extranjero

Con esta pequeña diferencia, Pérez dijo temer un fraude y pidió un recuento pues en el primer anuncio del conteo rápido oficial del domingo le colocaba en segundo lugar, y luego se habló de un empate técnico con Lasso.

Pérez llamó a sus seguidores y votantes a «estar atentos» y a movilizarse para que «vuestra voluntad no sea defraudada, que vuestra voluntad se respete», sugiriendo que desde el órgano electoral o algún poder político buscan modificar los resultados.

La Ley ecuatoriana requiere una segunda vuelta cuando el ganador no obtiene la mayoría absoluta o al menos un 40% de los votos válidos con una diferencia de 10 puntos sobre el segundo candidato.

La cantidad sin precedentes de candidatos, 16, fragmentó el voto de unos comicios para elegir presidente y vicepresidente, 137 miembros de la Asamblea Nacional y cinco del Parlamento Andino. El cuarto lugar era para Xavier Hervás, de Izquierda Democrática, con el 16,02 %, mientras el resto se situó por debajo del 2%,

Arauz se felicitó de su «amplio triunfo» y se mostró convencido de que la victoria en segunda vuelta «nos puede dar hasta mayor legitimidad que en una primera, porque lograremos superar el umbral del 50%, y más bien acercarnos al 60%».

Para ello, afirmó haber iniciado «acercamientos» con el liderazgo indígena y la socialdemocracia de Hervás

Pero desde el indigenismo Yaku Pérez reiteró que es «casi imposible» que no sea quien acompañe a Arauz en la segunda vuelta. «Es un triunfo histórico en Ecuador y todo esto nos lleva a pensar que en la segunda vuelta vamos a ganar. Por eso es que el señor Arauz, del correísmo, hacía hasta lo imposible para que yo no entrara», afirmó Pérez, que aseguró que se manipularon las encuestas.

«Va a ser muy, pero muy difícil, casi imposible, que puedan ellos cambiar los resultados, sobre todo cambiar la tendencia y la tendencia es que nosotros estamos en el segundo lugar», insistió.

Además, recordó que el Movimiento Pachakutik era segundo en la votación para la Asamblea con casi un 20% de apoyo, solo por detrás de la Unión por la Esperanza (UNES) de Rafael Correa y Andrés Arauz. «Algo pasa ahí. Algo no cuadra», afirmó. «El gran perdedor de estas elecciones además del señor Lasso es Correa, porque ellos aspiraban pasar en una sola vuelta», aseguró.

Lasso, por su parte, también se veía el domingo en segunda vuelta. «Le digo a los partidarios que mantengamos la calma, cuando veamos el 100 por ciento de las actas escrutadas se reconfirmará que estamos en segunda vuelta», aseguró aunque ayer guardaba silencio.

El CNE reconoció que podría tardar días en concretar qué candidato acompañará a Arauz el 11 de abril dependiendo de los recursos que presenten las organizaciones políticas. Uno de los vocales del CNE, José Cabrera, no quiso dar nada por cerrado. «En esta situación ustedes son testigos de que la diferencia es mínima, de unas décimas, y obviamente puede cambiar la situación», indicó.