EPPK reafirma la vía legal e insta a finiquitar las políticas de excepción

En un comunicado con motivo del Día Internacional del Preso Político, EPPK saluda los avances en Euskal Herria e insta a los Estados a dejar por completo las leyes y políticas planteadas a modo de «peaje». Por su parte, se reafirma en la vía legal hasta vaciar las cárceles. Y apunta que el 90% debería tener permisos y el 30%, libertad condicional.

Hacía tiempo que Euskal Preso Politikoen Kolektiboa no emitía un comunicado y lo ha remitido a GARA y NAIZ en el marco del día internacional de las personas presas por motivos políticos, que se celebra hoy sábado con movilizaciones en las capitales. En el texto, el Colectivo reconoce los «pasos propios de los Gobiernos español y francés desde 2018, sin seguir al pie de la letra los criterios de sus antecesores». Pero añade que, diez años después de Aiete, «es hora de dar solución a todas las consecuencias del conflicto». Y para llegar a un escenario sin presos, exiliados ni deportados, ve «imprescindible que Madrid y París abandonen por completo las políticas carcelarias que no hacen más que exigir peajes».

Recuerda al respecto que, «desde que concluyó el debate interno en 2017, EPPK ha mostrado más de una vez su disposición a recorrer el camino a la calle en el marco de la legislación penitenciaria. Continuamos en ello de modo incesante y reafirmamos nuestra decisión hasta sacar a la calle a todos los presos y presas políticas vascas».

El comunicado introduce un subrayado novedoso sobre la tortura, cuestión que tiene ahora «eco renovado» con elementos como el informe del Instituto Vasco de Criminología de la UPV-EHU. «Entre los miles de torturados identificados estamos las personas a quienes nos tienen presas. Más de un centenar, concretamente el 57%, denunciamos torturas tras la detención y las declaraciones arrancadas bajo tortura se utilizaron para imponer condenas».

Continúa exponiendo que «del mismo modo que los presos políticos vascos aceptamos el dolor causado con nuestra acción, quisiéramos recibir el reconocimiento del dolor que se nos ha causado», tanto en comisarías como en prisiones.

EPPK recuerda aquí que «el 90% tenemos cumplido un cuarto de la condena, por lo que nos corresponderían permisos de salida; 70 de cada 100 tenemos cumplida la mitad y nos correspondería el tercer grado; 30 de cada 100 tenemos cumplidas tres cuartas partes y nos corresponde la libertad condicional». Y cita la situación de los prisioneros enfermos, la de quienes llevan más de tres décadas entre rejas (Jakes Esnal, Jon Kepa Parot y Unai Parot) o el caso de Antton Troitiño.

«Vaciar las cárceles y traer a casa a refugiados y deportados no solo es necesario para los presos, también para Euskal Herria. La nueva situación que se vive hace ya un tiempo no puede dar por bueno que haya alguien en la cárcel, el exilio o la deportación por razones políticas. Es inaceptable mirando al futuro. Y resolverlo constituye una necesidad si se quiere construir la democracia», continúa.

Lo une con una mención al cuarto punto de Aiete; «esto es, que en la raíz del conflicto hay razones políticas y que igualmente son políticas las consecuencias, incluida la de que estemos presos. Hay que afrontar esas razones para lograr la resolución y convivencia democrática en nuestro pueblo».

El comunicado incluye un recuerdo a Igor González Sola, que murió en Martutene en setiembre, y a Asier Aginako, fallecido en octubre tras una enfermedad contraída en prisión. También una apelación a la juventud y un compromiso final: «Afrontaremos todos los obstáculos y dificultades en el camino».

Seis nuevos traslados acaban de vaciar Galicia de presos vascos

Instituciones Penitenciarias comunicó ayer seis nuevos traslados de presos vascos (cuatro de ellos a Euskal Herria) que conllevan una noticia importante: ya no queda ninguno en cárceles gallegas. Teixeiro, A Lama o Monterroxo han sido destinos muy duros para cientos y cientos de familiares de presos vascos. Tras los movimientos de los últimos meses quedaba solo uno en esos penales, Gregorio Eskudero. Ahora pasará de Teixeiro a Dueñas (Palencia), mientras que Itxaso Zaldua será llevada de Topas (Salamanca) a Villabona (Asturias).

Los cuatro presos que serán traídos a cárceles de Euskal Herria son Igor Martínez de Osaba, de Zuera (Zaragoza) a Zaballa; Gari Arruarte, de Soria a Iruñea; Ugaitz Pérez, de Logroño a Basauri, y Asier Bengoa, de Daroca (Zaragoza) a Zaballa. A Bengoa se le ha concedido, además, la progresión a tercer grado, que Instituciones Penitenciarias está aplicando con cuentagotas.

Como todos los viernes, ayer se realizadon movilizaciones por los derechos de los presos en decenas de localidades como Galdakao, donde se reunieron 85 personas; Zornotza, 40; Lekeitio, 82; Zarautz, 86; Berriozar, 25; Ugao, 70; Etxarri-Aranatz, 57; Lazkao, 60; Bera, 15; Durango, 71; Bergara, 37; Ondarroa, 123; Lezo, Gasteiz, 290; 25; Mutriku, 35; Oñati, 68; Legorreta, 27; Hernani, 162; Arbizu, 25; Usansolo, 20; Amurrio, 80; Antzuola, 37; Deba, 42; Donostia, 87...R. S.