GARA
bruselas

La UE pagará otros 3.000 millones de euros a Turquía para el control migratorio

La UE pagará otros 3.000 millones de euros a Turquía para seguir subcontratando el control migratorio, un acuerdo que no satisface a Ankara. El Gobierno turco exige a la UE un mayor respaldo político más allá de la cuestión económica, y avances en la unión aduanera.

La Comisión Europea confirmó que propondrá conceder otros 3.000 millones de euros a Turquía hasta el año 2024 para «apoyar la gestión» de los refugiados, principalmente sirios, en su territorio, tras el acuerdo alcanzado en el Consejo Europeo. Además, se destinarán otros 2.200 millones serán destinados a Jordania y Líbano.

El Estado turco acoge actualmente a unos 3,7 millones de refugiados procedentes de Siria, parte de los cuales desea entrar en la Unión Europea. A raíz de la crisis migratoria de 2015, Bruselas llegó a un acuerdo con Ankara para ofrecerle financiación a fin de que pudiera atender a estas personas en su territorio, evitando así su llegada a Europa. El primer acuerdo fijó una ayuda de 6.000 millones de euros.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, invitó a los Estados miembros «a contribuir con más financiación». En el caso de Turquía, la ayuda «se centrará más en el apoyo socioeconómico a los refugiados y no tanto a la mera asistencia de emergencia», ya que estas personas «viven ya desde hace años en la región y necesitan una perspectiva para los próximos años».

Sin embargo, el Gobierno turco consideró estos acuerdos insuficientes y lamentó que el bloque quiera reducir la colaboración en el ámbito migratorio solo a una cuestión económica.

El Ministerio de Exteriores turco indicó ese dinero «va destinado a los refugiados sirios, no a Turquía» y que con él a UE garantiza «su propia paz y seguridad». El Ministerio afirmó que la parte turca «ha cumplido de sobra» todo lo que se le ha pedido para reducir tensiones y afeó a la UE que no adopte «decisiones concretas» para poner en práctica una «agenda positiva». Entre las reivindicaciones de Ankara figura la actualización de la unión aduanera de 1995.

Ankara atribuye los pocos avances a la falta de voluntad europea y al supuesto abuso que estarían ejerciendo «uno o dos» Estados miembro, sin aludir a ninguno en concreto. La cumbre constató que la UE se debate en la necesidad de que Ankara cumpla su papel de guardia fronterizo y los diversos conflictos que tensan la relación. Así, Von der Leyen, advirtió que la Bruselas rechaza la solución de dos Estados para Chipre, ante la visita a la isla que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, prepara para el 20 de julio, en el aniversario de la operación militar Attila que llevó a su partición.