GARA
BUDAPEST

Rechazo y desobediencia ante la ley homófoba de Hungría

Varias ONG y la comunidad LGTB+ húngara anunciaron que desobedecerán la ley que vincula homosexualidad con pederastia y que prohíbe la «promoción» de la homosexualidad y el cambio de sexo entre los menores. El pleno del Parlamento europeo aprobó con los votos en contra de Vox y la abstención de PP una resolución de condena.

La ley que ayer entró en vigor en Hungría prohíbe la «promoción» de la homosexualidad y el cambio de sexo para menores de 18 años y establece que solo instructores autorizados por el Gobierno pueden impartir educación sexual en las escuelas. Las empresas no podrán hacer anuncios que muestren apoyo a los homosexuales si se considera que están dirigidos a menores, según la normativa.

Educadores y empresas editoriales han expresado su preocupación ante la posibilidad de que libros de literatura clásica sean retirados de los programas escolares si se considera que contravienen la ley. De hecho, una librería fue multada el miércoles con 700 euros por no indicar en un libro que «presenta actitudes diferentes de las de los géneros tradicionales». El libro, titulado “¡Qué familia!” expone, a través de cuentos, familias no tradicionales.

El pleno del Parlamento europeo aprobó ayer una resolución en la que expresó su «firme condena» de la ley, reclamó acciones legales contra el Gobierno de Viktor Orban y que se asegure que no se destinan fondos europeos a proyectos que violan los derechos fundamentales.

En contra votaron el grupo de Conservadores y Reformistas, incluido Vox, y los ultraderechistas de Identidad y Democracia (ID), mientras que el Partido Popular se abstuvo en bloque, a excepción de Esteban González Pons, quien apoyó la resolución como la mayoría del Partido Popular Europeo.

El primer ministro, Viktor Orban, alega que «esta no es una ley sobre homosexualidad, sino una ley sobre cómo educar a los niños en cuestiones de sexualidad», sostuvo.

Algunos analistas afirman que el ataque de Orban a la comunidad LGTB se asemeja a sus leyes contra la inmigración y busca fortalecer su base de votantes antes de las elecciones.

Amnistía Internacional de Hungría y la asociación Háttér por los derechos LGBT+ anunciaron que desobedecerán la ley. Ambas organizaciones hincharon un globo de diez metros de alto, en forma de corazón y los colores del arcoiris frente al Parlamento. El presidente de AI, Dávid Víg, aseguró que «no cambiará ni una letra» ni de sus programas educativos ni de sus campañas. El 11% de los homosexuales en Hungría afirma haber sido objeto de agresiones físicas y el 40 %, de acoso verbal.