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Activar su autonomía militar e industrial, reto para la UE

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, presentó ayer sus principales proyectos para la pospandemia, con una apuesta por fortalecer el papel de la Unión Europea (UE) en la lucha contra el cambio climático y su protagonismo internacional. Además de poner en valor el proyecto comunitario y su unidad frente a la pandemia, en su segundo discurso sobre el estado de la UE citó como retos su autonomía industrial y de defensa.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, centró ayer su segundo discurso del Estado de la Unión en la recuperación de Europa de la crisis del coronavirus, y abogó por que la UE refuerce su «alma». Entre los retos apostó por la soberanía de microchips, la lucha contra el cambio climático y la necesidad de aumentar el protagonismo internacional, en concreto en el plano militar.

La caótica retirada de Afganistán revivió la reflexión sobre la autonomía militar de la UE y Von der Leyen dijo que «lo que necesitamos es una Unión Europea de Defensa».

«Ha llegado el momento de que la UE dé un paso más» para «defenderse de los ciberataques, actuar donde la OTAN y la ONU no están presentes y gestionar las crisis a tiempo», apuntó.

En su discurso señaló que no pueden depender solo del «poder blando». «Europa puede y debe ser capaz y estar dispuesta a hacer más por sí misma», dijo.

«Puedes tener las fuerzas más avanzadas del mundo, pero si nunca estás listo para usarlas, ¿para qué sirven?», se preguntó Von der Leyen, quien denunció una «falta de voluntad política».

Adelantó que habrá una cumbre dedicada a la Defensa en el primer semestre de 2022, aunque el proyecto para crear una fuerza europea de reacción rápida de unos 5.000 soldados, en discusión durante varios meses, aún está lejos de ser unánime.

En su discurso ante el Parlamento Europeo, defendió su gestión de la pandemia de coronavirus, pero pidió más vacunas en la UE y en todo el mundo para poder pasar página.

«Cuestión de soberanía»

La Comisión tiene la intención de aprovechar el colosal plan de recuperación pospandemia para construir una economía europea más verde y digital, al tiempo que busca fortalecer la autonomía industrial del continente. Por ello, Von der Leyen pidió impulsar la producción europea de semiconductores, una tecnología crucial para la que la UE sigue dependiendo de Asia tanto en su diseño como en su producción. «Es una cuestión de soberanía», observó. Y para lograrla anunció un plan para tener un nuevo ecosistema de fabricación que mantenga a Europa competitiva y autosuficiente, a través de la presentación de «una nueva ley europea de chips».

Pero por encima de todo, Bruselas quiere confiar en su ambicioso Pacto Verde y los objetivos europeos de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para conciliar la recuperación económica y las preocupaciones medioambientales.

«Europa no puede hacer todo por sí sola. Las principales potencias económicas, EEUU o Japón, se han fijado objetivos de neutralidad climática para 2050 o poco después», como la UE, pero «estos objetivos deben estar respaldados por planes concretos».

La UE precisa también reflexionar sobre cómo será la economía pospandemia, dijo.

«Necesitamos pensar en cómo la crisis ha cambiado el rostro de nuestra economía, desde la profundización de la deuda hasta las repercusiones desiguales en diferentes sectores, incluyendo nuevas formas de trabajar», sustuvo. Ante una recuperación aún precaria, la UE «no repetirá el error» cometido tras la última crisis financiera, cuando un precipitado regreso a la austeridad fiscal hizo que el continente recayera en la recesión.

Afganiarrentzat dirulaguntza gehiago agindu du Von der Leyenek

Von der Leyenek 100 milioi euro gehiago agindu du Afganistani laguntza humanitarioa bidaltzeko.

Aurtengo 57 milioi euroko laguntza aurreikusia zuen, baina talibanak itzultzearekin batera 200 milioira handitu zuen, herritarren beharrek gora egingo dutela jabetuta.

Orain 300 milioi dira guztira «laguntza sorta handiago baten inguruan».

«Gosete handi baten eta hondamendi humanitario baten arriskua ekidin behar dugu, nola edo hala», azaldu du.

Europar Batasuna beldur da Afganistango krisiarekin ez ote den errepikatuko 2015an gertatu zen errefuxiatu-oldea. Urte hartan milioi bat errefuxiatu abiatu zen Europara, siriarrak, afganiarrak eta beste hainbat herrialde arabiarretakoak.

Alemaniak zabaldu zizkien ateak, baina ez dirudi Europan herrialde bakar bat prest dagoenik espero diren 500.000 afganiarrak hartzeko.

Beti gauza bera gertatzen zaio Europari. AEBen erabaki eta abentura militarrekin bat egiten du eta gero Washingtonek europarrak kontuan hartu gabe hartzen ditu erabakiak. Ondorioek, berriz, Europa zuzenean astintzen dute.

Nazio Batuen Erakundeak jakinarazi duenez, nazioarteko komunitateak 1.200 milioi euroko dirulaguntza agindu die Afganistanen lan egiten duten GKEei. Nola helaraziko dien ez du zehaztu. GARA