Amplio apoyo a Aukerak, agencia de reinserción social de presos

La víspera de recibir hoy la transferencia de Prisiones, el Parlamento de Gasteiz apoyó ayer mayoritariamente la ley de creación de Aukerak, agencia de reinserción social de personas presas, que se encargará de organizar el trabajo productivo en las prisiones y su retribución, y favorecer un itinerario laboral para las personas que salgan de la cárcel.

Con los 68 votos a favor de PNV, EH Bildu, PSE y Elkarrekin Podemos-IU, y los 7 en contra de PP-Cx y Vox, el Parlamento de Gasteiz aprobó ayer la creación de la agencia Aukerak. Su objetivo es organizar el trabajo productivo en los centros penitenciarios y su retribución, y favorecer un itinerario laboral para las personas que salgan de la cárcel.

La ley se ha tramitado por el procedimiento de lectura única, dada su urgencia y la simplicidad de su articulado. La Agencia debe estar en funcionamiento el 31 de diciembre de 2021, puesto que es la fecha negociada para que el organismo estatal Trabajo Penitenciario, que cumple la misma función, deje de ejercerlas. Cabe recordar que la competencia de prisiones a Lakua se oficializa hoy, pero hay un plazo para la adaptación.

El ente se crea porque la legislación obliga a que para reconocer los derechos laborales del trabajo de los presos se cree un organismo distinto a la propia administración, puesto que de lo contrario se entendería que ese es un trabajo ocupacional. En la actualidad hay unas 354 personas presas trabajando, de las que 240 están empleadas en talleres, mientras que el resto lo hacen con acuerdos con empresas ajenas a la cárcel.

La finalidad de Aukerak es «facilitar la inclusión socio-laboral de las personas internas en los establecimientos/centros penitenciarios de Euskadi». Y para ello realizará las funciones de «organizar el trabajo productivo en los centros penitenciarios y su retribución, gestionando talleres productivos», así como gestionar la comercialización de esa producción.

Además, promoverá la formación profesional de las personas privadas de libertad y la «orientación para el empleo en la última fase de la condena o en el régimen de semilibertad».

Según señaló la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, se quiere dar una segunda oportunidad a las personas que salen de prisión y añadió que se hará con una visión de género.

Posición de los grupos

En el turno a favor de la ley intervino en primer lugar la parlamentaria del PSE María Jesús San José, que en la pasada legislatura fue consejera de Justicia y que quiso reivindicar la labor realizada en la materia por su departamento y sus viceconsejeros Miren Gallastegi y el fallecido Mikel Unzalu. Desde el PNV, Laura Pérez defendió las posiciones del Gobierno e incidió en la apuesta por la justicia restaurativa de la política penitenciaria que pretende ponerse en marcha.

Elkarrekin Podemos-IU y EH Bildu participaron en el turno de explicación de voto. Miren Gallastegi, portavoz del grupo morado, destacó la necesidad de tener estructuras propias para la resocialización de presas y presos y para garantizar el derecho a su trabajo remunerado. Aseguró que comprende la prisa para la aprobación de la ley, aunque aseguró que es un procedimiento que no les gusta. Pidió espacios de diálogo entre el Gobierno y oposición para hablar de la política penitenciaria.

Desde EH Bildu, Eraitz Saez de Egilaz insistió en que su grupo quiere ser un «activo incansable» en el trabajo por un nuevo sistema penitenciario, que se base en garantizar el derecho a una vida digna de las presas y presos tanto dentro de la cárcel como cuando salgan de ella, con el objetivo de la «reinserción de todas y cada una de esas personas». Defendió el apoyo de su grupo asegurando que la «creación de Aukerak y que haga de empleador, dando trabajo y formación, es importante y tenemos que estar aquí».

El parlamentario de Cs Luis Gordillo justificó el voto en contra de su grupo no en que esté en contra de la reinserción de los presos –«que está recogido en el artículo 25 de la Constitución», recordó– sino porque no les gusta que se tramite en lectura única, ya que cree que merece un debate más amplio. También apuntó que la norma tiene deficiencias técnicas, recogidas en los propios informes gubernamentales, y apostó porque la materia se hubiera gestionado a través de un convenio con el Estado.

El Grupo Mixto abogó por la centralización de la gestión penitenciaria. Amaia Martínez anticipó que con la transferencia se dará un trato de favor para algunos presos y denunció la nueva agencia como de «colocación de estómagos agradecidos y personas fieles e ideología nacionalista».