Duterte anuncia que dejará la política y despeja el camino electoral a su hija

El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, anunció ayer que se retirará de la vida política cuando termine su mandato y que no se presentará a las elecciones para el cargo de vicepresidente en 2022, como tenía previsto. «En obediencia a la voluntad de las personas que, después de todo, me auparon hace tanto tiempo a la Presidencia, ahora anuncio este sábado que me retiro de la vida política», afirmó.

Duterte expresó en agosto su deseo de presentarse al cargo de vicepresidente –legalmente no puede revalidar mandato– en una decisión que muchos denunciaron como un intento de aferrarse al poder. Ahora asegura que ha cambiado de opinión basándose en «el sentimiento universal del filipino reflejado en las diferentes encuestas y en muchos foros». «El sentimiento abrumador del filipino es que no estoy cualificado, y que se trataría de una violación del espíritu constitucional», añadió.

En su lugar, respaldó la candidatura a la Vicepresidencia del senador y estrecho colaborador Christopher Go. Esta decisión despeja el camino a su hija y actual alcaldesa de Davado, Sara Duterte-Carpio, que hasta ahora se había negado a postularse a la Presidencia por la eventual candidatura de su padre.

Si finalmente cumple su anuncio, Duterte pondrá fin a cinco años en el poder marcados por su brutal campaña antidroga, en la que la Policía ha participado en ejecuciones extrajudiciales en su persecución contra los narcotraficantes, extendida a la población civil en general, con cerca de 30.000 muertos, incluidos niños.