La ineficacia condena al Eibar

Los azulgranas remontaron el gol inicial del Mirandés pero después flojearon en las dos áreas para dejarse dos puntos.

MIRANDÉS 3

EIBAR 3

El Eibar se dejó dos puntos en Anduva, víctima de los errores y de los tópicos. Desaprovechó ocasiones tras haber remontado el gol inicial del Mirandés y permitió después que los rojillos neutralizaran dos goles de desventaja para acabar empatando a un minuto del final.

A los azulgranas les faltó eficacia rematadora –tres goles en ocho ocasiones frente a las cuatro que necesitaron los locales– y sobre todo capacidad para mantener la puerta a cero, algo que sólo han conseguido una vez esta temporada. Para más inri, permitió que el equipo que más centra a primer palo anotara así dos de sus tres goles –y poco faltó para un tercero–. Les queda el consuelo de haber enlazado su séptima jornada en positivo, lo que les permite mantenerse en el grupo cabecero pero sin alcanzar el ritmo de los mejores.

Hubo sorpresas y novedades en el arranque. Etxeita y Fran Sol ni siquiera entraron en la convocatoria –«problemas físicos, aún no hay parte» fue la escueta explicación del club– y, además, Glauder y Rahmani se quedaron fuera del once. Hubo cambio de sistema, con defensa de cuatro y Expósito por delante del doble pivote, y entraron Burgos, Sergio, Leschuk y Tejero, que regresaba a la titularidad tras dos jornadas de banquillo para colocarse en la izquierda.

El Eibar quiso mandar desde el principio pero el Mirandés fue más resolutivo. En su primera estirada forzó una falta que Iñigo Vicente metió al primer palo y Simón Moreno, con diez jugadores rivales en el área, remató cruzado para hacer el 1-0.

Afortunadamente, el Eibar reaccionó de inmediato y se fue creciendo con el paso de los minutos. Stoichkov, en una buena jugada coral pero con algo de fortuna, y Corpas, transformando un penalti con maestría y la sangre más fría que Drácula, voltearon el marcador recién cumplida la media hora.

Hubo amago de reacción local pero el descanso y el Eibar pusieron freno a la rebelión. Los guipuzcoanos, además, regresaron mejor de vestuarios. Un golazo de Expósito, con recorte y disparo a la escuadra, amplió su ventaja y precedió a sus mejores minutos.

Pero el balón no volvió a entrar y se pasó del perdón al castigo. El Mirandés dio un paso adelante y un penalti en el 67 transformado por Iñigo Vicente metió a su equipo definitivamente en el partido. Los rojillos se volcaron en la portería de Cantero ante un Eibar que, por momentos, boqueaba y que tras el 3-3, con un centro de Riquelme al primer palo para el remate de Brugué, acabó el partido pidiendo la hora.

Sanse y Amorebieta se enfrentan este domingo a rivales de la parte alta

El Sanse, reanimado tras la victoria de Alcorcón, regresa a «casa» para enfrentarse a la Ponferradina.

Ipurua (14.00, Movistar+) acogerá el encuentro, que los donostiarras afrontan con el regreso de Lobete, Djouahra y Romero pero sin Ayesa, Pokorny, González de Zarate y Roberto López. El equipo de Bolo está firmando un gran arranque de Liga aunque como visitante sólo ha marcado y ganado en su visita, precisamente, a Ipurua.

El Amorebieta, por su parte, quiere confirmar la línea ascendente que ha marcado en sus dos buenos partidos ante Eibar y Sporting en su visita a otro rival de la zona alta, el Tenerife (18.15, Movistar+). Iñigo Vélez recupera a Oier Luengo tras cumplir su sanción, que regresará también al once titular. A.U.L.