Amaia U. LASAGABASTER
SEGUNDA

Otra prueba de superación

El Sanse se sobrepuso primero a la expulsión de Zubiaurre y después al gol que adelantaba a la Ponferradina.

SANSE 1

PONFERRADINA 1


El Sanse salvó su enésima prueba de superación. En una temporada en la que se le acumulan los obstáculos cada jornada, ante uno de los rivales que mejor ha empezado el curso y ejerciendo de local en un campo que no es el suyo, se sobrepuso primero a la expulsión de Zubiaurre y después, con los dos equipos ya con diez, al gol que adelantaba a la Ponferradina.

Encaró el choque con cinco cambios en el once. Se caían Ayesa y Pokorny, con compromisos internacionales, los lesionados González de Zarate y Roberto López y Varela. Y ocupaban sus vacantes Zubiaurre, Magunazelaia, Aldasoro y, tras tres jornadas con el primer equipo, Lobete y Romero. No dio tiempo a ver cómo funcionaban las novedades porque en el minuto dos una acción desgraciada rompía el partido. Agus Medina pescó un balón largo y chocó con Zubiaurre fuera del área. Incluso con las numerosas repeticiones de las cámaras era complicado discernir si el golpe fue involuntario o tuvo culpables pero el árbitro no dudó y el portero tuvo que irse a la caseta doblemente dolido, por el golpe y por la roja directa. Cambio forzoso de planes para Xabi Alonso, que retiró a Karrikaburu para que debutase Unai Marrero.

No supo aprovechar la Ponferradina ni el shock ni la inferioridad de su rival que, salvo en una jugada similar a la de la expulsión –otro balón largo en busca de Espiau que acabó en falta–, no se vio inquietado. Poco antes de la media hora, el partido, que ya estaba equilibrado en el juego, lo hizo también en el plano numérico, por el puñetazo de Espiau a Ezkurdia en el área, que se saldó con roja directa para el delantero.

Poco más pasó en un primer tiempo con más interrupciones, faltas y tarjetas que juego y ocasiones aunque el Sanse se fue acercando sin mucha claridad pero con asiduidad creciente a la porteria rival.

Parecía que la segunda parte empezaba de forma similar pero a los ocho minutos, Dani Ojeda anotó el 0-1. Era el primer disparo a puerta del partido para los bercianos, que se animaron con la ventaja.

El Sanse no se resignó a poner la otra mejilla y frenó el arreón visitante dando a su vez un paso adelante. Lobete y Naranjo forzaron a Lucho y Marrero antes de que Alkain levantara a la grada con su golazo. El hondarribitarra, que ya firmó uno de los mejores goles de la jornada la semana pasada, entró en el área por la derecha para recortar ante dos rivales y enviar un chutazo a la escuadra opuesta.

El gol le sentó bien al equipo txuriurdin, que estuvo a punto de anotar el segundo con un remate de Lobete que Copete sacó junto a la línea. No aprovecharon los donostiarras sus mejores minutos para redondear la remontada y la Ponferradina fue reapareciendo para, si no imponerse, sí evitar que los tres puntos se fueran a Donostia.