En un golpe final de fortuna, el Athletic rescató un punto en Anoeta cuando parecía todo perdido. La pesadilla de la derrota en la final de Copa sobrevolaba entre los rojiblancos después de encajar un gol de penalti cometido por Iñigo Martínez, que además acababa expulsado. Al de Ondarroa le volvió a penalizar ese ímpetu y ganas de demostrar ante su exequipo. En realidad, nadie puede dudar de su valía ya que en las últimas temporadas ha sido el jugador más regular del Athletic con diferencia y es un seguro de vida, pero esos nervios le pasaron factura y se equivocó en las acciones sancionadas.

En un derbi pasado por agua y sabor de antaño, Muniain salió al rescate de su equipo en el tramo final. El capitán no se esconde en el campo y siempre asume la responsabilidad. Sacó una falta al borde del área con el tiempo cumplido y su disparo se coló en la portería tras el clamoroso error de Remiro. En un gesto que le honra, el de la Txantrea se acercó a consolar a su excompañero, olvidándose de los objetos que le lanzaron desde las gradas y la actitud del portero navarro en las celebraciones de la final de Copa. Hay que saber ganar y perder y el Athletic asumió con dignidad una derrota que el equipo ya tiene superada.

El punto cosechado ante el líder de la Liga deja a los rojiblancos al acecho de los puestos europeos. La dinámica es positiva y las próximas jornadas marcarán las aspiraciones del equipo. La ilusión generada tras el partido ante el Espanyol no fue refrendada en Anoeta. La baja de última hora de Balenziaga por problemas estomacales condicionó el once de un Marcelino que apostó por los futbolistas más veteranos de la plantilla dejando en el banquillo a los jóvenes como Sancet y Nico Williams. El Athletic estuvo muy bien plantado sobre el campo en la primera mitad y apenas concedió un par de remates. Incluso, tuvo la mejor ocasión para abrir el marcador en el primer minuto por medio de Williams. Al delantero le faltó ese instinto goleador para finalizar la acción antes de la intervención de Elustondo. Ese sigue siendo el principal reto del equipo rojiblanco para subir un peldaño en la clasificación. No cometer errores en partidos cerrados como el de ayer y acertar en las ocasiones que se tengan.