Amaia U. LASAGABASTER
SEGUNDA

Alivio y obligación en la vuelta a Ipurua

Aprietan los rivales, que condenan al Eibar a cerrar la jornada fuera del ascenso directo. Ipurua recibe a un equipo aliviado por tener que jugársela en un estadio del que nadie se ha podido llevar un punto desde hacer tres meses pero también obligado a prolongar su trayectoria como local, con seis victorias consecutivas a sus espaldas, si quiere recuperar una segunda plaza a la que se le acumulan los candidatos.

Precisamente trata de ratificarse en esa lista un Girona cuya condición de aspirante peligró en un penoso arranque de Liga pero que vuelve a cobrar fuerza. Y es que tras haber encajado seis derrotas en las diez primeras jornadas, ha revivido celebrando cinco victorias en las siete posteriores.

Hoy testará su progresión en la fortaleza de un rival con demasiados «peros» para estar tranquilo pese a su situación clasificatoria. En las últimas jornadas el rendimiento del Eibar ha caído a domicilio –derrota en Valladolid y empate en Fuenlabrada y Lugo– y las sensaciones tampoco han sido buenas últimamente en Ipurua donde, a falta de juego, ha tirado de pegada y fortuna para derrotar a Oviedo y Alcorcón. Si ese es también el camino para derrotar al Girona, no se le harán ascos, pero los armeros buscarán algo más. Y, probabemente, lo necesitarán ante un rival que Gaizka Garitano, de hecho, sitúa entre los mejores de la categoría. «No empezaron bien pero seguramente van a estar top3 o top4 a final de temporada» por los jugadores «que tienen, buenos, con experiencia, la manera en la que juegan… Tienen mucha pegada arriba, gente con mucha creatividad en medio campo, buenos medias puntas… Es un equipo muy completo».

No hay convocatoria ni parte de bajas pero en principio faltarán Venancio, Selva y Franchu. Corpas regresará al once en detrimento de Quique y la gran duda, como siempre, pasa por quiénes ocuparán los laterales.