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La derecha francesa elige a Pécresse entre cantos de sirena ultras

La derecha de Les Rèpublicains nombró a Valérie Pécresse como candidata para las presidenciales con una agenda basada en endurecer las trabas a la inmigración y reducir el empleo público. La derrota de Eric Ciotti, aún más próximo a los mensajes xenófobos, sirvió a los candidatos de la ultraderecha para lanzar cantos de sirena a sus seguidores.


La presidenta de la región parisina de Ile-de-France, Valérie Pécresse, del ala liberal, fue nominada ayer candidata a la Presidencia por el partido Les Républicains (LR) para 2022. Pécresse obtuvo el 60,95% de los votos contra el 39,05% de Eric Ciotti, diputado por los Alpes Marítimos, quien se mostró más afín a el extrema derecha pero que inmediatamente se alineó con la candidata en un congreso virtual.

«La derecha republicana ha vuelto. Llevaré un proyecto de franca ruptura, tengo el valor de decir y la voluntad de hacer, no me temblará la mano frente a los adversarios de la República», afirmó Pécrasse. Con un programa que también cede a las posiciones de la ultraderecha en cuestión de inmigración y liberal en economía, Valérie Pécresse, exministra de Presupuesto, se enorgulleció de estar «en el baricentro de la derecha» y, por tanto, ser capaz de unirla.

En su proyecto de «orden», propone concretamente cuotas anuales de inmigración, un endurecimiento de la reunificación familiar o la presentación de solicitudes de asilo desde las embajadas al extranjero.

También propone un juramento de «respeto al secularismo» para los funcionarios públicos y una prohibición del «uso forzado» del velo y a los acompañantes escolares. En el frente económico, quiere relanzar, a partir de la primavera, la reforma de las pensiones, un «derecho a la vivienda prioritaria» para los trabajadores de primera línea y una reducción de 200.000 puestos de funcionarios pero la creación de otros 50.000 para «proteger, educar y curar».

LR, heredero del movimiento gaullista que fue la principal formación de gobierno durante casi 60 años en el Estado francés, no se ha recuperado de su eliminación de la segunda vuelta de las presidenciales de 2017.

Fue la primera vez en la Quinta República y un fracaso cinco años después del que vivió Nicolas Sarkozy derrotado en la segunda vuelta por François Hollande. Por ello, el partido espera desencadenar con esta primaria y con la imagen de una «mujer moderna», una dinámica que le evite otra decepción.

Desde la ultraderecha le llegan los cantos de sirena de la candidata de Rassemblement National (RN), Marine Le Pen, y de Eric Zemmour.

Le Pen instó a unirse a sus votos a los votantes de LR «decepcionados» por el nombramiento de Valérie Pécresse, a la que calificó como «la más macronista» de los aspirantes de LR.

Por su parte, Zemmour se dirigió a los seguidores de Eric Ciotti, a quien calificó de «patriota indiscutible». «Estamos tan cerca y tenemos mucho en común», les cortejó Zemmour, la víspera de su primer gran mitin al que les invitó. «Podemos hacer cosas inolvidables juntos. Las haremos», añadió.

La extrema derecha europea sincroniza su agenda

Los líderes de 13 partidos de extrema derecha de varios países europeos se dieron cita en Varsovia en una reunión promovida por el polaco Partido de la Ley y la Justicia (PiS) –en conflicto con Bruselas, al igual que Hungría– para sincronizar agendas. Además de los anfitriones, el líder del PiS, Jaroslaw Kaczynski, y el primer ministro polaco, Mateusz Morawecki, participaron el primer ministro húngaro, Viktor Orban, la líder del francés Agrupación Nacional, Marine Le Pen,y el presidente del español Vox, Santiago Abascal, entre otros. Aunque discutieron la posibilidad de votaciones conjuntas en el Parlamento Europeo, no lograron establecer una alianza formal ni la creación de un nuevo grupo parlamentario de extrema derecha. «Es una alianza táctica para darse publicidad y fortalecer las posiciones individuales de los partidos», analizó el politólogo polaco Wojciech Przybylski que pronosticó que la reunión «no va a significar demasiado hasta las próximas elecciones al Parlamento Europeo».

En la Eurocámara, los partidos ultraderechistas se dividen actualmente en dos grupos distintos. RN (Estado francés) y la Liga (Italia) pertenecen al grupo Identidad y Democracia, mientras que Derecho y Justicia, Vox y Fratelli d'Italia pertenecen al grupo Conservadores y Reformistas Europeos. El húngaro Fidesz busca otros socios desde que se divorció en marzo del grupo del Partido Popular Europeo.GARA