REAL SOCIEDAD B 0

BURGOS C. F. 1

El Sanse no tiene la ayuda que necesita y encadenó ayer su noveno partido como local sin ganar tras la victoria de la primera jornada ante el Leganés, con tres empates y seis derrotas que provocan que lleve seis puntos en casa y once fuera y quede empatado con el Amorebieta en las tres últimas posiciones.

El partido era una buena oportunidad para salir de la zona de descenso y acercarse al Burgos, que jugó como en casa, como le recordaron sus millares de aficionados que llenaron la zona visitante y que superaron en número a los del Sanse, lo que se notó en el arbitraje, muy malo y perjudicial para el filial.

No solo le falta al Sanse el apoyo de la afición, también el de Imanol. Xabi Alonso pudo contar con tres de los jugadores que se vistieron con el primer equipo el día anterior ante el Madrid, los titulares Lobete y Robert Navarro –este solo 45 minutos– y Djouahra, pero no con Jon Pacheco. Lleva con 20 años 67 minutos en Liga y Europa League, pero el oriotarra solo le ha dejado disputar un partido en Segunda en El Molinón, donde fue clave en la victoria.

Una jugada clave

En su ausencia, la de Arambarri y Ezkurdia, el tolosarra colocó como tercer central izquierdo a un pivote derecho como Pokorny, que estuvo muy desacertado y demostró que extraña esa posición al no seguir a Ernesto, que era el mejor situado para marcar el gol marcado en una acción en la que Valcarce superó con facilidad a Blasco.

Ese detalle en la única jugada de ataque del Burgos del primer tiempo provocó la derrota del Sanse, al que le faltó además tomar mejores decisiones en los últimos metros para traducir su dominio en ocasiones y goles.

Xabi Alonso acabó el partido sin centrales y con todos sus delanteros y tuvo un remate de Karrikaburu en el último minuto al larguero, que impidió que el filial sumara el punto que mereció ante un Burgos que logró que se jugara lo mínimo posible con la ayuda del árbitro.