Ingo NIEBEL
PERFIL

El socialdemócrata neoliberal que sigue a Angela Merkel

El noveno canciller de la República Federal de Alemania, Olaf Scholz, nació el 14 de junio de 1958 en Osnabrück, Baja Sajonia, y es el mayor de tres hermanos. Ayer, sus padres, Gerhard y Christel, siguieron la votación desde la tribuna de visitas del Bundestag. Ambos trabajaron en el sector textil, él como gerente y ella, de vendedora. Sus hijos Jens e Ingo son director de una clínica universitaria y jefe de área de una empresa informática, respectivamente. Hasta ahora, no han comentado la trayectoria política de su hermano Olaf.

En su silencio sobre cuestiones privadas los Scholz se parecen a la excanciller democristiana Angela Merkel (CDU), que ha mantenido a su familia fuera del interés mediático. Su sucesor socialdemócrata comparte con ella cierta falta de sentido del humor y de emocionalidad, una característica que responder al cliché de cómo son los alemanes del norte. Descrito por “Der Spiegel” como «la encarnación del aburrimiento» en política, por su retórica, un tanto mecánica y artificial, el periodista del semanario liberal “Die Zeit” Jan Ross inventó el término «Scholzomat», que combina su apellido con la palabra «autómata», porque dicen que responde como un robot. Preguntado sobre qué le parecía dicha descripción, el aludido respondió, escuetamente: «Muy acertada». En sus apariciones públicas parece ser, como antes Merkel, otro «canciller de teflón», al que no se le pega nada de lo que se le echa en cara.

A los 17 años, Scholz se afilió al Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD). Inició su carrera política en la organización juvenil. Tradicionalmente, los «jóvenes socialistas» (Jusos, según su denominación oficial) sirven de cantera en la que los afiliados pueden manifestar si tienen potencial para ser futuros dirigentes. Al mismo tiempo, es el lugar donde empiezan a tejer la red que les servirá para ir escalando en las estructuras del SPD.

Inicios marxistas

Entre 1982 y 1988, Scholz perteneció a una corriente marxista de los Jusos. Arremetió contra una «OTAN agresiva e imperialista» y, durante la Guerra Fría, intervino en calidad de vicepresidente de los Jusos en mítines políticos de la socialista República Demócrata Alemana. Paralelamente estudió derecho y se colegió como abogado especializado en Derecho Laboral. Dejó de ejercer su profesión en 1998 cuando salió elegido diputado en el Bundestag.

Ese mismo año se casó con Britta Ernst, militante socialdemócrata como él. Ambos residen en Potsdam, capital del estado federal de Brandenburgo, donde ella es ministra de Educación. El matrimonio no tiene descendencia.

Aquel año, el socialdemócrata Gerhard Schröder formó el primer bipartito con los Verdes ecologistas a nivel nacional, poniendo fin a 16 años de Gobierno del canciller Helmut Kohl (CDU). A partir de 2000, Scholz lideró el comité regional de Hamburgo, que integra el ala derechista del SPD. Dos años más tarde, en 2002, respaldaba al líder de su partido, Schröder, al ser elegido secretario general. Dimitió con él en 2004, cuando buena parte del SPD le retiró su confianza al canciller por sus drásticos recortes sociales, parte de su política neoliberal. En 2005, Schröder perdió la Cancillería y Scholz, que le seguía siendo leal, fue diputado y secretario del grupo parlamentario.

Como consecuencia de esa derrota, Merkel formó con el SPD la primera Gran Coalición. Dos años más tarde llamó a Scholz para que fuera su ministro de Trabajo. Cuando en 2009 la canciller creó un bipartito con los liberales (FDP), Scholz centró sus esfuerzos en Hamburgo, donde este obsesionado por la política salió elegido alcalde gobernador del estado-ciudad en 2011. Se mantuvo en el cargo hasta 2018, cuando Merkel le llamó de nuevo, esta vez para ser su ministro de Finanzas y vicecanciller en la tercera Gran Coalición.

En 2019, Scholz, férreo defensor del techo de endeudamiento, perdió la batalla por liderar el SPD. Ganó el ala izquierdista con Saskia Esken y Norbert Walter-Borjans. Ante la desastrosa imagen que el SPD proyectaba a principios de 2021, se decidió que Scholz protagonizara él solo la campaña electoral. Triunfó gracias a los errores de la CDU y a la labor de su secretario general, Lars Klingbeil, futuro copresidente del SPD con Esken. Para su gabinete, Scholz ha nombrado socialdemócratas de su confianza, sabiendo que la paz con el ala opuesta es temporal.

Sobre el nuevo canciller pesa que está involucrado en el fraude fiscal conocido como Cum-Ex y en la quiebra de la empresa financiera Wirecard. Ambos casos son objeto de investigaciones periodísticas y parlamentarias.