Manex ALTUNA
BILBO
DERBI VASCO EN SAN MAMÉS

El Athletic tumba a la Real y se mete en la lucha europea

El conjunto rojiblanco se coloca a un punto de la Real en la clasificación de Liga al acecho de los puestos europeos. Remiro detuvo un penalti a Muniain en el primer tiempo, pero Vivian y Sancet rompieron la igualdad en la segunda mitad en sendas acciones a balón parado consecutivas. Williams y Muniain redondearon la goleada.

ATHLETIC 4

REAL 0


El Athletic se impuso con autoridad a una Real que se mantuvo con opciones con el empate en el marcador, pero que acabó derrumbándose y saliendo goleada en la segunda mitad. En un primer tiempo trabado y de pocas ocasiones, Muniain desperdiciaba un penalti ante un Remiro que se lucía con una parada, a pesar de los pitos en su contra.

La igualdad existente se rompió en la segunda mitad a balón parado. Primero Vivian abría el marcador y después anotaba Sancet en otro córner. En el tramo final los rojiblancos se tomaron su pequeña venganza con otros dos goles celebrados por todo lo alto en las gradas. La victoria deja al Athletic a un punto de la Real en la clasificación de Liga, al acecho de los puestos europeos.

El conjunto donostiarra, en cambio, deberá centrarse en la vuelta de la eliminatoria europea del jueves. Además, tiene un partido más de Liga por jugar ante el Mallorca.

La previa del derbi arrancaba en Zornotza al mediodía con un derbi entre bertsolaris en el que Anjel Mari Peñagarikano fue galardonado por difundir los valores del Athletic. La jornada quedó algo deslucida en cuanto a ambiente por las restricciones de aforo en San Mamés. No se pusieron entradas a la venta, pero en los aledaños del estadio se pudieron ver bastantes camisetas de la Real. Aunque fueron menos que en otras ocasiones y el ambiente fue algo más frío, dieron algo de colorido en los aledaños del estadio bilbaino.

Asimismo, en la plaza Kirruli recordaron a Iñigo Cabacas. En abril se cumplen 10 años desde que falleciera tras recibir un pelotazo por parte de la Ertzaintza. Una kalejira reivindicó también la oficialidad de las selecciones vascas antes de empezar el partido en San Mamés.

En los prolegómenos, en el interior del estadio se cantó ‘Txoria txori’ en una iniciativa promovida por el Gobierno de Gasteiz y que contaba con el respaldo de ambos equipos para fomentar el uso del euskera en el deporte. Se guardó también un emotivo minuto de silencio en recuerdo de Mauri, mítico centrocampista rojiblanco en la década de los 50, que falleció el viernes y en honor del exdirectivo Fidel Basterra.

Marcelino e Imanol introdujeron muchos cambios en las alineaciones con respecto al último partido. Seis cambios en el bando local, con Vivian repitiendo en el eje de la zaga con Inigo Martínez, y cinco en el conjunto txuri-urdin con Zubeldia de central.

A la Real, ni a Remiro pitado en cada acción que intervenía, le hizo mella la presión ambiental y se hizo con el control de la pelota buscando salir jugando desde atrás. El Athletic optó por esperar más retrasado de lo habitual sin presionar tan arriba. La intención era robar y encontrar algún hueco jugando con velocidad. Mikel Merino fue el primero en chutar a portería desde lejos con un disparo que se marchó alto en el minuto 11. Los rojiblancos replicaron a balón parado con un cabezazo desviado de un Raúl García que estaba en fuera de juego.

El Athletic dejaba que la Real moviera el balón entre los centrales y Remiro. El portero llegó a estar durante unos cuantos segundos con la pelota en sus pies sin que nadie le entrara. Quería evitar que los jugadores más talentosos de la Real recibieran con ventaja como ocurrió en una acción en la que Silva logró girarse y posibilitó un centro en carrera de Portu que no encontró rematador.

Penalti por mano

En el otro lado el Athletic apenas inquietaba, pero empezó a llegar y se encontró con un penalti advertido por el VAR. Un lanzamiento de Williams salió despejado tras golpear en las manos de Silva al cubrirse y el colegiado decretó la pena máxima. Muniain fue el encargado de realizar el lanzamiento, aunque Remiro adivinó sus intenciones. El navarro estaba crecido y se lucía en San Mamés con una estirada de mérito despejando a córner. Poco después atajaba también un tiro de Yuri al primer palo.

Al borde del descanso Iñigo Martínez era amonestado por una mano al borde del área que propició una falta sin peligro. El primer tiempo acababa con un cabezazo forzado de Oyarzabal. Partido cerrado y de pocas ocasiones. Demasiado respeto entre ambos equipos. Ninguno quería dar un paso de más para evitar quedar al descubierto.

Consciente de que necesitaba más la victoria para acercarse a los puestos europeos, el Athletic tomó la iniciativa en el inicio del segundo tiempo y Berenguer tuvo una buena ocasión para abrir el marcador de cabeza. Williams y Raúl García también lo intentaban. A la Real le valía el empate para mantener la distancia con su perseguidor y se limitó a contener las embestidas de los leones con la esperanza de que aparecería su oportunidad.

Merino y Vesga fueron sustituidos por Guridi y Vencedor tras un choque y también entraban al campo Sancet y Rafael. Ambos entrenadores movían el banquillo al mismo tiempo. El Athletic seguía siendo el que más buscaba la portería rival, pero no conseguía finalizar las jugadas. Faltaba ese punto de acierto que encontraron a balón parado con un espléndido cabezazo de Vivian.

El equipo y la grada celebraron con ímpetu el tanto y los rojiblancos continuaron achuchando a la Real. Así llegaba prácticamente seguido el segundo tanto en otro córner con un gran remate de Sancet. A falta de más de un cuarto de hora para el final, Imanol parecía dar por perdido el derbi al meter a los canteranos Djouahra y Martín pensando en reservar jugugadores para la Europa League. Williams marcaba el tercero y Muniain el cuarto para regocijo de un San Mamés que gozó con la victoria.