Ainhoa Tirapu aspira a la presidencia de la nueva Liga

La exguardameta del Athletic anuncia su precandidatura conjunta con Dolores Martelli a un proceso que se pondrá en marcha encuanto se aprueben los estatutos de la competición. El CSD adelanta que ese paso se dará el próximo lunes.

Ainhoa Tirapu podría convertirse en la primera presidenta de la Liga profesional femenina de fútbol, una competición que ya debería estar en marcha, después de que la Comisión Deportiva del Consejo Superior de Deportes aprobase el pasado 15 de junio la profesionalización de la categoría. El proceso puede dar un acelerón ahora porque, según adelantó ayer el presidente del CSD José Manuel Franco, el lunes próximo se aprobarán por fin los estatutos, el punto en el que estaba encallado. El anuncio llegaba en una fecha tan simbólica como el 8 de marzo, que también escogieron Ainhoa Tirapu y Dolores Martelli para hacer pública su candidatura a la presidencia de esa nueva Liga.

Precandidatura, en realidad, ya que aún no se ha abierto el plazo para la presentación de candidaturas, para lo que resulta imprescindible la aprobación de los estatutos, ni los requisitos necesarios. Pero bajo el lema «Unidas por el fútbol», Tirapu y Martelli ya adelantan su intención de concurrir a las elecciones con la «primera candidatura independiente y liderada íntegramente por mujeres que, avaladas por su amplia experiencia, buscarán desarrollar la máxima categoría del fútbol». Explican que su proyecto «se sustenta en la experiencia dentro y fuera del campo» de Tirapu y Martelli y que «busca el desarrollo del fútbol femenino a través del consenso y la inclusión, apoyándose en la confianza, la independencia y el conocimiento de sus impulsoras».

Ainhoa Tirapu colgó las botas hace dos años, tras una larga trayectoria que arrancó en Lagunak y le llevó a militar tres lustros en el Athletic, donde ahora ejerce de entrenadora de porteras. Licenciada en Química, fue una de las representantes destacadas de las futbolistas en la negociación del convenio colectivo. Dolores Martelli, por su parte, ha desarrollado su larga carrera en el mundo del marketing y el deporte. Fue responsable de patrocinio de fútbol femenino en Iberdrola y pasó después a la Federación Española de la mano de Luis Rubiales, que le nombró directora de Fútbol Femenino de la RFEF, aunque dimitió de su puesto antes de un año en el mismo. El objetivo de ambas, han informado, es «desarrollar la Liga Profesional de Fútbol Femenino y recuperar el tiempo perdido en las últimas temporadas, uniendo los esfuerzos públicos y privados que permitan lograr una Liga competitiva y sostenible».

La profesionalización, un proceso interminable

Si lo prometido por José Manuel Franco se cumple, el lunes se firmarán los estatutos de la Liga, nueve meses después de que se aprobara su profesionalización.

Los desacuerdos entre los clubes, la oposición de la Federación Española o la actitud del propio CSD, indisolubles de todos los problemas que ya se arrastraban, con los derechos de televisión y la lucha entre Liga y RFEF en el fondo, han ido retrasando no ya la puesta en marcha de la competición, sino cada uno de los pasos previos. Empezando por los estatutos. Pese a no ser un requisito legal, el CSD exigió la unanimidad de los clubes pero, incluso una vez conseguida, hace ya más de tres meses, los plazos se han seguido dilatando.

Una vez aprobados, se elegirá la Junta Directiva y la presidenta, que será independiente de los clubes y, se aseguró en un principio, será una mujer. Los rumores colocan insistentemente entre las candidatas a María Teixidor, María Tato y Ana Muñoz pero el primer paso adelante lo han dado Tirapu y Martelli.A.U.L.