Natxo MATXIN
ATHLETIC

Se le escapa vivo un rival directo

Los rojiblancos dominaron el choque durante la primera hora, gracias a sus veloces contragolpes.

VILLARREAL 1

ATHLETIC 1


Pudieron ser tres puntos, pero el Athletic tuvo que conformarse con uno ante un Villarreal repleto de suplentes –el submarino amarillo se juega frente al Bayern el pase a semifinales de la Champions este próximo martes–, al que tuvo controlado durante la primera hora, incluso poniéndose por delante en el marcador al filo del descanso.

Hasta ese momento en el que los anfitriones lograron igualar la contienda, los pupilos de Marcelino supieron jugarles con precisión y velocidad, buscándole las cosquillas y la espalda a un bloque local muy lento en la circulación de la pelota. A diferencia de una escuadra rojiblanca que enlazó un buen número de matemáticos contragolpes, a los que les faltó una mejor definición, especialmente por parte de un trabajador, pero poco preciso, Iñaki Williams.

El delantero de Errotxapea estuvo presente en casi todos los lances ofensivos de su equipo, como en el primero a destacar por su peligrosidad apenas superada la media hora de juego, siendo el asistente de un Óscar de Marcos –intercambiaron sus habituales papeles– que remató de cabeza casi a bocajarro, aunque centrado, para que sacase a dos manos Asenjo.

Apenas unos minutos después se produjo la primera jugada controvertida del duelo. Un chut de Muniain resultó obstaculizado por el codo de Aurier dentro del área local. Nadie reclamó nada en ese instante, ni tampoco después, pero el VAR tocó a rebato a Del Cerro Grande y el trencilla madrileño, tras consultarlo con la pantalla, no concedió pena máxima.

El VAR concede el 0-1

El Athletic insistió por mediación de Iñaki Williams, quien partió desde la izquierda, dribló a su marcador y se plantó ante el meta palentino, pero Mandi supo recuperarse para taponar el disparo. Cada vez más cerca del 0-1, los leones dieron con la diana poco antes del receso. De nuevo, otro gran contragolpe colectivo acabó culminado por Raúl García. El colegiado pitó fuera de juego en primera instancia, pero el videoarbitraje le corrigió, dando validez al tanto.

Con un panorama tan favorable e insistiendo el bloque vizcaino en los puntos flacos del Villarreal, el segundo periodo comenzó con la misma tendencia, percutiendo Iñaki Williams sobre la zaga castellonense, aunque quizás un tanto ansioso por la necesidad de todo ariete de reivindicarse con el gol.

Sin embargo, la tendencia varió de manera radical. Los anfitriones encontraron el camino del empate y, con la entrada de varios titulares, pusieron en apuros la portería de un Unai Simón que supo sostener a los suyos con dos grandes paradas.

Se recompusieron los de Marcelino para el tramo final con la savia nueva de Nico Williams y Sancet, al disponer ambos de dos buenas ocasiones, frenadas por el también buen hacer de Asenjo, con lo que el electrónico ya no se volvió a mover.

«Dimos un buen nivel, luego está el acierto»

Aunque el Athletic no pudo lograr los tres puntos, sí que cae de su lado el gol average particular ante un rival directo y sigue metido de lleno en la lucha por los puestos europeos. «Es una pena no haber ganado, jugando un buen partido», se quejó Marcelino.

«El equipo dio un muy buen nivel. Luego está el acierto. Estamos satisfechos por el partido, por el juego, y estamos descontentos por el resultado, ya que pensamos que podíamos ganar. Por las sensaciones, nos vamos bien», añadió el técnico rojiblanco. GARA