Decenas de palestinos resultaron heridos ayer en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén después de que la Policía israelí lanzara gases lacrimógenos desde drones contra los congregados en este templo sagrado para los musulmanes. Alrededor de 150.000 palestinos acudieron ayer a las oraciones del tercer viernes del Ramadán.

Según la Media Luna Roja, 31 personas, entre ellas tres periodistas, sufrieron heridas por las cargas policiales. En los rezos de hace una semana, hubo más de 150 heridos y 400 detenidos. Se da la circunstancia de que en una semana han coincidido las celebraciones de Ramadán y el Pesaj o Pascua judía.

Según el statu quo en vigor desde 1967, Jordania custodia la Explanada de las Mezquitas, donde el culto está reservado solo a los musulmanes; mientras que los judíos solo pueden entrar como visitantes y rezar en el cercano Muro de las Lamentaciones. Sin embargo, cada vez más colonos judíos entran para rezar en el área donde se cree que se ubicó el Segundo Templo. Jordania ha protestado formalmente ante Israel por no respetar el statu quo del templo. Ayer, cientos de jordanos se manifestaron en el centro de Amman en contra de la violencia israelí. Los manifestantes, encabezados por líderes de partidos políticos y de sindicatos profesionales, levantaron pancartas y corearon consignas en las que pidieron al Gobierno jordano que cancele el tratado de paz firmado con Israel en 1994 y expulse al embajador israelí.