Ernesto Valverde parece «condenado» a entrenar al Athletic, ya que sus caminos siempre confluyen en el club rojiblanco. En todo caso, el de Viandar De la Vera, a sus 58 años -con el pelo ya cano aunque con un aire moderno, sin chaqueta y con la camiseta fuera de los pantalones- ha retornado a un Athletic en pleno proceso de cambio y relanzamiento tras las recientes elecciones.

Flanqueado por el presidente Jon Uriarte, que realizó ayer sus primeras declaraciones en calidad de presidente del Athletic, el flamante entrenador de los leones volvía a asumir un reto que definía como «una aventura».

«No es habitual presentar tres veces a la misma persona, pero es un honor. Sé que tengo un reto difícil, en el sentido de que tengo una presión añadida por haber estado aquí antes y ser de aquí. Pero la asumo con ganas. Me ilusiona el equipo e intentaremos que la gente se sienta orgullosa del club», indicó en su primera intervención de una presentación breve.

TRAYECTORIA

Los números avalan al entrenador en su regreso a San Mamés. No en vano ha logrado cinco clasificaciones europeas en las seis temporadas que dirigido al Athletic, una de ellas para la Liga de Campeones, y rompió una sequía de 31 años sin títulos con el obtenido en la Supercopa de 2015, levantado en el Camp Nou tras un global de 5-1 al FC Barcelona.

Precisamente por todos esos números a su favor, fue inevitable preguntarle los motivos por los cuales ha tomado Valverde la resolución de volver al club rojiblanco.

«El global del Athletic es mucho. Te fijas en todo. Siempre he querido mantener la distancia respecto del Athletic cuando no he estado aquí. Cuando ha surgido metes todo en el bombo: el equipo, jugadores, a la gente que trabaja conmigo, la que trabaja en Lezama; el estadio, la afición, la gente, el compromiso que hay... Me afecta directamente porque soy de aquí y hay una presión añadida. Pero es una aventura y hay que ponerse las pilas», resumía.

«El Athletic significa mucho para mí. Sé lo que significa el Athletic no solo en Bilbao sino en un montón de sitios más. He tomado la decisión de intentarlo. Siempre es un reto apasionante, y tenía que ser un reto estimulante y complicado para poder cogerlo; así tienen que ser los retos», subrayó, que aclaró que ha firmado por una sola compaña con la escuadra rojiblanca.

«Aunque uno nunca sabe cuánto tiempo estará en un equipo, a estas alturas de mi carrera, me gustan así y me va bien así», indicó, al tiempo que advertía que «conozco muchas claves de Lezama y el vestuario, pero eso no es suficiente. Hay mucho trabajo detrás de los puntos».

SIN DETALLES

Valverde no quiso dar pistas sobre el juego del Athletic y los nombres propios que van a tener el papel protagónico en su proyecto. «Cuando lleguemos al río, cruzaremos el puente», indicó.

«Me gustaría que al final de temporada se pudiera ver las fotos en las que el equipo gana. Está bien que el Athletic se mantenga en la lucha por los puestos que dan acceso a Europa. Estabilizar en esas posiciones sería lo ideal», ubicó los objetivos de su discurso.