Mikel INSAUSTI
CRÍTICA: «EL ATRACADOR PERFECTO»

Un famoso ladrón apodado Flying Bandit

Ajuzgar por “El atracador perfecto” (2022), que es una entretenida comedia de accción, a Allan Ungar se le ve oficio dentro del cine de género y una buena dirección actoral. Es más, creo que gran parte del atractivo de la película está en su reparto, que cumple con creces, empezando por un Josh Duhamel que consigue dotar de simpatía y encanto a su personaje delictivo, con la ayuda de un Mel Gibson relegado a funciones secundarias. Bien también Elisha Cutbert, como pareja del protagonista, y los que dan mucho juego son Nestor Carbonell y Swen Temmel, haciendo de pareja policial antitética, y que por momentos sienten que están persiguiendo a un fantasma o a alguien que se burla de ellos.

Las andanzas de este famoso ladrón canadiense, resultan increíbles, y ahí está la gracia, porque están tomadas de una realidad de lo más sorprendente y chocante. El antihéroe en cuestión es conocido como Fying Bandit, debido a que para cometer sus delitos uitilizaba vuelos nacionales en los que no había controles de equipaje. Había cruzado la frontera huyendo de un penal de Michigan, y ya en su nuevo destino se buscó una identidad falsa, cambiando su nombre de Gilbert Galvan Jr. por el de Robert Whiteman.

El futuro atracador tarda en entrar en acción al principio, pero al no poder prosperar de una forma honrada, opta por improvisar un robo que, contra todo pronóstico, sale bien. Le parece tan fácil desvalijar bancos y joyerías que se lanza a una loca carrera de una sesentena de golpes, utilizando en el camino ridículos disfraces y torpes engaños, pero siempre sin recurrir a la violencia.