Koldo LANDALUZE
DONOSTIA
YOKO OPORRETAN

Reivindicación del juego y la imaginación

Juanjo Elordi y Rishat Gilmetdinov estrenaron en 2015 “Yoko eta lagunak”, la primera prolongación en formato cinematográfico de la popular serie animada infantil. Siete años después, se ha estrenado la segunda entrega fílmica que, al igual que la primera, ha sido producida por la compañía vasca Dibulitoon y Wizart Animación.

Dirigida al público más exigente, el infantil, vuelve a incidir en su apuesta por reivindicar de forma divertida que jugar al aire libre, en un espacio seguro pero con libertad, es fundamental para el desarrollo emocional, social y físico de la chavalería. Un entorno reconvertido en un mundo fantástico en el que los protagonistas interactúan con otros niños, con la naturaleza, con sus anhelos, sus sueños y sus miedos.

El juego y la imaginación

Los personajes son los mismos que asoman en la serie y todos ellos están capitaneados por Yoko, una criatura fantástica e impredecible que intenta sorprender y proteger al resto. A ese suman tres niños que representan otras tantas personalidades muy diferentes entre sí, pero complementarias y que siempre acaban entendiéndose a la perfección y solucionando mediante el juego cualquier problema que se les presenta.

Además, en esta nueva entrega aparecen tres nuevos personajes: Moko, Toko e Izoko, genios como Yoko que provienen de otros parques dispersados por el mundo y que aportan sus juegos para que los niños despierten su imaginación. Se trata, en definitiva, de una muy saludable y humilde propuesta animada cuya plasmación en imágenes resulta atractiva y que en su faceta argumental, resulta muy acorde a estos tiempos actuales en los que es tan necesaria la interacción en espacios abiertos.