La Fiscalía Federal de Bélgica informó en un comunicado de que el magistrado Michel Claise imputó ayer a cuatro de los seis detenidos en relación con la trama de presuntos sobornos por parte de Qatar a personas que pudieran influir en la toma de decisiones del Parlamento Europeo, entre ellas su vicepresidenta, la socialdemócrata griega Eva Kaili, y dejó en libertad a los otros dos, tras tomarles declaración el sábado. Kaili se ha convertido en la primera gran víctima política de este escándalo al ser suspendida de sus funciones en el cargo de vicepresidenta.

Según medios locales, el juez imputó los delitos de participación en organización criminal, blanqueo de capitales y corrupción a Kaili, a su pareja y asesor en la Eurocámara Francesco Giorgi, a un lobista bruselense y al exeurodiputado socialdemócrata italiano Pier Antonio Panzeri, en cuya casa hallaron 600.000 euros.

Las dos personas a las que dejó en libertad con cargos son el padre de Kaili, a quien la policía detuvo el viernes in fraganti mientras intentaba escapar con bolsas llenas de billetes, y el secretario general de la Confederación Internacional de Sindicatos, el italiano Luca Visentini.

La Fiscalía sospecha que Qatar ha pagado «grandes cantidades de dinero» y ha ofrecido «regalos significativos» a personas que tienen una «posición política estratégica» en el Parlamento Europeo, para influir en sus decisiones.

El caso ha llegado hasta Italia, donde el sábado fueron arrestadas en Brescia Maria Colleoni y Silvia Panzeri, esposa e hija del exeurodiputado.

La investigación continúa abierta, y el sábado por la noche la Policía registró la vivienda del eurodiputado socialdemócrata belga Marc Tarabella, donde estuvo presente la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola.

Tanto Kaili como Tarabella han mantenido encuentros recientes con representantes de Qatar y ambos defendieron que el país del Golfo ha avanzado en materia de derechos laborales en un debate parlamentario sobre las violaciones de derechos humanos durante la construcción de los estadios del actual Mundial de Fútbol.

Kaili se reunió recientemente en Qatar con su ministro de Trabajo, Samikh al-Marri, y Tarabella lo hizo con el portavoz qatarí de Exteriores el 2 de junio.