En estas fechas en que tanto se habla de la familia, de críos, de mayores… ¿somos conscientes de la situación en que se encuentran tantas personas de avanzada edad y sus familias? En LAB creemos que hay que revisar todo el modelo asistencial de atención a estas personas. No se puede limitar a internarlas en centros geriátricos. Hay que ofrecer más alternativas, trabajar en favor de un envejecimiento activo e implementar políticas integrales de asistencia y acompañamiento a todos los niveles.

Hoy en día, de las 71 residencias de atención a la tercera edad que existen en Navarra, solo dos son públicas y dependientes del Gobierno de Navarra: El Vergel en Pamplona y Santo Domingo en Estella. El resto están en manos de empresas privadas a quienes, como es lógico, lo único que les interesa es lograr beneficios. Es necesario revisar el modelo asistencial y crear una red de residencias públicas en Navarra.

Desde LAB llevamos tiempo denunciando el modelo asistencial en Navarra. La atención a las personas residentes debería ser gestionada a través de una red de residencias públicas. Es inmoral que se haga negocio con la asistencia de estas personas y a costa de las condiciones laborales de las trabajadoras. ¿Alguien entendería que en todo Navarra solo hubiera dos centros escolares públicos y el resto fueran concertados o privados?

La memoria es frágil y pronto se olvida que, en los dos primeros meses de la pandemia, falleció el 10% de las personas residentes en los centros de titularidad privada mientras que, en las dos únicas residencias públicas, el número fue muchísimo menor. Pese a esa evidencia, el Gobierno de Navarra continúa con la política de desmantelamiento de lo público y su entrega a empresas privadas. En los últimos años, sin ir más lejos, están dejando que las condiciones laborales se deterioren, los ratios se alejen de los estándares europeos y que, en consecuencia, la calidad disminuya.

La atención a las personas de la tercera edad debería abordarse como un pilar dentro de los servicios sociales que debe prestar la Administración. Por ello, desde LAB reclamamos la creación de una red pública de residencias y que se deje de hacer negocio a costa de la salud y la vida de nuestras personas mayores.