Joseba ITURRIA
CICLISMO

Apoyo a la familia de Estela Domínguez y al Sopela tras su cruel atropello mortal

La hija del exprofesional Juan Carlos Domínguez fue arrollada con 18 años por un camión mientras se entrenaba en Salamanca, donde estudiaba.

Estela Domínguez celebra en Balmaseda un segundo puesto que reforzaba su liderato en la Copa.
Estela Domínguez celebra en Balmaseda un segundo puesto que reforzaba su liderato en la Copa. (RFEC)

El atropello mortal de Estela Domínguez, corredora de 18 años del Sopela, mientras se entrenaba el jueves en Salamanca provocó una profunda conmoción en el mundo ciclista por la forma en la que murió arrollada por un camión, por su juventud y porque su padre es muy conocido y querido por su etapa como ciclista profesional desde 1995 hasta 2006, con victorias como la conseguida en la Euskal Bizikleta en 2001.

El padre transmitió su pasión por el ciclismo a su hija y un camión se la arrebató como murió en noviembre David Rebellin en Italia. Dos muertes muy dolorosas, pero con la diferencia de que el italiano falleció tras dar por concluida con 51 años la carrera más larga de los últimos años y Estela Domínguez la vio truncada con solo 18, sin llegar a debutar con el Sopela vasco que la fichó tras ser unas de las mejores juniors de la pasada campaña.

Solo un pinchazo en la prueba final le impidió ganar la Copa de España, en la que fue líder desde la segunda a la última carrera. Además fue cuarta en los estatales contrarreloj y quinta en los de línea.

Una esperanza arrollada por un camión cuando se entrenaba en Salamanca. Se apunta a una distracción o una mala visibilidad como causa de un atropello que le supuso la muerte inmediata.

UNA FAMILIA ARROPADA

Estela Domínguez estudiaba en Salamanca, a donde se trasladaron sus padres Juan Carlos y Yolanda, que tuvieron el apoyo de Laudelino Cubino, para acompañarla hasta el tanatorio de Valladolid, donde recibieron la visita de más excompañeros como Óscar Freire y del que fuera su director en Vitalicio, Javier Mínguez. Todo el ciclismo transmitió el apoyo a la familia y al Sopela y la rabia por otro atropello que deja en evidencia la vulnerabilidad de los ciclistas en la carretera.