La mayoría que hizo lehendakari a María Chivite presentó el jueves por la tarde dos propuestas de ley en el Parlamento que permitirían al Gobierno cumplir con lo fundamental del acuerdo alcanzado con el Sindicato Médico (la subida de 400 euros mensuales a través de un nuevo complemento), a la vez que incluían otras mejoras para el resto de la plantilla, incluyendo el reconocimiento de la carrera profesional. Ambas propuestas se registraron apurando el plazo. No quedan demasiados plenos y la Cámara tiene muchos compromisos por resolver. Las leyes se tratarían el 16 o el 23 de marzo.

Del acuerdo queda fuera Navarra Suma, pese a que -tras una reunión con el SMN- se había ofrecido al Gobierno para apoyarle, únicamente, en las demandas planteadas por los médicos.

Esta eventual solución llegaba, precisamente, cuando el bloque sindical mayoritario (LAB, USAE, UGT, ELA y CCOO) ha anunciado que iba a intensificar sus movilizaciones con concentraciones, asambleas, una gran manifestación por la sanidad pública para el día 18 y la convocatoria de una jornada de paro el 23.

Previamente, el Gobierno había ofrecido a la Mesa General de Función Pública el desbloqueo de la carrera profesional para todo el personal funcionario, dentro y fuera de Osasunbidea. En la actualidad, esta figura solo está reconocida en Nafarroa para el personal de Medicina y Enfermería. La implantación de la carrera se haría de forma progresiva y el detalle se debería negociar a tres entre la Mesa General y el Parlamento y el Gobierno resultantes de las próximas elecciones. Eso sí, acordaron que esta negociación tiene que resolverse este mismo año.

Recelo

El bloque sindical recogió ayer con cierto recelo el acuerdo y se reafirmó en las movilizaciones que ha convocadó. Además, avanzó que lanzarán una contrapropuesta. A su entender, el Gobierno de Chivite pretende «deslegitimar las propuestas del comité de huelga desviando la atención a aspectos meramente económicos».

Así, estas centrales lamentaron que el texto sea muy concreto a la hora de apuntalar lo negociado con el Sindicato Médico, pero que esta definición no se dé en aspectos que para los sindicatos mayoritarios son trascendentales, como «el dimensionamiento de la plantilla, el establecimiento de grupos de trabajo para disminuir la sobrecarga laboral de la plantilla tanto en Atención Primaria como especializada, acometer de forma urgente estrategias para la disminución de la eventualidad de Osasunbidea, que supera el 50%, y un largo etcétera».

En lo referente a la carrera, los sindicatos recuerdan que ellos no entienden este concepto como un plus económico, sino que permite «el reconocimiento de funciones para la realización de su trabajo de modo que redunde de forma directa en la atención de la ciudadanía; formación que debe realizarse desde el ámbito público, con las condiciones adecuadas».

Mejoras a tratar en el Parlamento

Las proposiciones de ley que ha acordado el PSN con sus socios habituales darán luz verde a ese aumento de salario de 400 euros que se discutió en el acuerdo con el SMN, así como un incremento en el precio de las guardias y la compensación por el ejercicio de tutorías. Se propone, asimismo, un complemento de puesto de trabajo para el personal administrativo de los equipos de Atención Primaria y de los servicios de urgencias extrahospitalarias.

También se recoge una mejora salarial para los administrativos con atención directa al público. Según explicó el parlamentario de EH Bildu Txomin González a GARA, habían detectado demasiada rotación en estos puestos debido a la penosidad de este trabajo y este plus económico buscará afianzar a este personal.

Otro tema que incluye esta propuesta normativa son los desplazamientos para puestos de difícil cobertura para los equipos de Atención Primaria que tienen que trasladarse a puntos lejanos a la cabecera de área correspondiente.

En último término figura también la equiparación del complemento por día de trabajo en festivo especial. Hasta ahora, se cobraba más o menos en función del salario de cada trabajador. La propuesta, una vieja reivindicación sindical, era que todos cobraran lo mismo en tanto que se paga por la penosidad de ir a trabajar en una fecha singularmente señalada.