El golpe de Mariezkurrena equilibra las fuerzas de cara a las semifinales

En un partido de dos mitades antagónicas, tras una primera parte muy equilibrada e igualada, Jon Ander Peña consiguió sumar su remate de aire a la superioridad de su zaguero en el peloteo y resultaron inalcanzables para Peio Etxeberria y Rezusta.

Simplificándolo mucho, y sin intención de menospreciar a nadie, podríamos decir que las semifinales del Parejas que arrancan la próxima semana juntarán a las dos referencias de los cuadros delanteroS con los dos mayores pegadores del cuadro. Todo esto después de que Jon Mariezkurrena desnivelara la balanza en el partido definitivo del play-off disputado en un desangelado Bizkaia. Con este resultado, Baiko equilibra las fuerzas de cara a la liguilla y respira tras la fuerte apuesta realizada a la hora de confeccionar las parejas.

Superados los problemas en su derecha, este fin de semana Jon Mariezkurrena volvió a ser el del verano, abrió enormes huecos sin apenas cometer errores y fue un factor diferencial, incluso en jornadas como la de ayer en la que, al menos en la primera mitad del partido, la zurda se le encogió a Jon Ander Peña. Y es que, el partido definitivo del play-off tuvo dos partes antagónicas, una muy igualada y peloteada hasta el 9-8, y una segunda en la que los de Baiko pasaron por encima de unos Peio Etxeberria-Rezusta que seguro todavía se están lamentando de la oportunidad que dejaron pasar el viernes en Zornotza.

Y eso que en esa primera parte equilibrada vimos a un Peio Etxeberria mucho más participativo e incisivo, que trató de incomodar a su par entrando de volea y buscándole su derecha. Atrás, Jon Mariezkurrena gozó prácticamente cada pelotazo, incomodando a un Rezusta bastante seguro pero superado, que vivió de la falta de inspiración de Jon Ander Peña.

Sin embargo, el guión cambió sobremanera. Tras unos primeros tantos disputados con un material bastante tosco, los de Baiko pusieron en liza una pelota más viva, el dominio de Mariezkurrena se incrementó y la segunda parte fue un paseo para una pareja que, cuando suman todo su potencial, son imparables.