Solo 48 horas después de haberle metido 35 puntos a Fenerbahçe, el escolta serbio cerraba anoche su semana fantástica liderando con 24 puntos la victoria de Saski Baskonia en La Fonteta, una plaza de donde Marinkovic salió por la puerta de atrás y del que no guarda ningún grato recuerdo.

En lo que va de campaña, los gasteiztarras han derrotado al Real Madrid en sus cuatro enfrentamientos, pero ayer logró hacer otro tanto con Valencia Basket, un rival al que, a este paso, uno puede imaginarse cruzándoselos en los cuartos de final de los play-offs de la Liga ACB, pero con perspectivas muy claras para los de Peñarroya.

Eso sí, en este tramo final de la Euroliga absorbe muchas energías y claro, cuando hay que dejarla aparcada y retomar la Liga ACB, no es tan sencillo. Valencia Basket y Saski Baskonia han disputado en La Fonteta un partido extremadamente irregular, con momentos brillantes por ambos lados, sobre todo por parte gasteiztarra, pero lleno de desconexiones y de ausencias de concentración que han igualado el partido por lo bajo. Y aun después de la explosión anotadora de Marinkovic y después de que Costello desempatara a 75 con un triplazo, el partido tuvo un final accidentado en el que Valencia Basket tuvo una opción de voltear el duelo, aunque Giedraitis provocó la violación por pasos de Chris Jones.

DUELO DE PARCIALES

También se explica con mayor facilidad cómo es posible empezar un cuarto con 0-7 para acabar perdiéndolo por 18-14 después de comprobar que el cuadro alavés sumaba en diez minutos nada menos que nueve pérdidas, al tiempo que Chris Jones y Jasiel Rivero iban entrando en juego. En todo caso, con el criterio que le ha dado Darius Thompson y el tino desde la línea de tiros libres y los errores de Valencia Basket, Saski Baskonia ha vuelto a escaparse con un parcial de 1-14.

Tras el 35-37 del descanso, el encuentro se sumergió en un duelo de alternancias, en el que fue apareciendo Marinkovic para contrarrestar los 25 tantos de Rivero, y Matt Costello de igual manera. Todo ello para cerrar la semana con otra victoria en una cancha difícil.