Raimundo FITERO
DE REOJO

Sin remisión

La exageración en las formas, los números y las letras se ha convertido en una manera de instaurar la ideología de la opulenta mentira en los sustratos más vulnerables de las mayorías silenciosas que gritan demasiado. Ver el despliegue de Donald Trump con su avión particular y las decenas de coches blindados de comitiva es una obscenidad de repercusiones freudianas. Su arrogancia, su ruta, su amenaza es un acto totalitario, golpista, antidemocrático y fascistoide. Pero es el nuevo rey de la nueva era, muerto Berlusconi, su inventor, y a punto de enterrarse, y habla de la decadencia de EEUU, un amenazante estado fallido, una mueca de democracia liberal, un peligroso contaminante. Sin remisión.

En este marco de estética norcoreana se van sucediendo elecciones, tomas de posesión, pactos y proclamas en donde se encumbran palabras mágicas, como ahora la extrema derecha española usa «cambio», que no es otra cosa que la traducción desde la falta de inteligencia política humanista de «se van a enterar estos rojos y separatistas». Lo incuestionable es que al despertar se comprueba que el dinosaurio que seguía ahí ha despertado también y que llegan tiempos duros para cualquier iniciativa de instaurar equilibrios sociales. Sin remisión, caminamos con la ortopedia de una perspectiva que nos discapacitan para vivir con la alegría de los sueños húmedos democráticos porque vamos derechos a la cancelación más rotunda de las libertades. Han pasado otra vez y están las circunstancias preparadas para repetir si no se levantan verdaderas murallas de resistencia sin amistades peligrosas.