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LOS AMANTES DEL ENGAÑO

A orillas de un Sunset Boulevard en la Costa Azul


Firmante de películas en las que queda de manifiesto su interés en plantear una mirada al pasado y con ejemplos claros como fueron la saga reboot “OSS 117” y “La Belle Époque”, Nicolas Bedos sigue observando de reojo hacia atrás en este nuevo proyecto en el que, a diferencia de los títulos citados con anterioridad, tienen parte de su base en las propias vivencias del director. En concreto, las experiencias que el director vivió siendo joven en la Costa Azul.

Bedos nunca ha negado el sello que le legó su padre, Guy Bedos, un conocido humorista, actor y guionista que participó en películas como “¿Y si vivimos todos juntos?”.

Si bien hay ciertos puntos de conexión con lo filmado con anterioridad, sobre todo desde una perspectiva cinéfila, Bedos ha querido distanciarse un poco de lo anterior y, sobre todo, de la prolongada sombra de su padre, para filmar una película en la que sus personajes dejan muy claro que lo suyo no es el altruismo.

LOS BUSCAVIDAS

En clave de mascarada, “Los amantes del engaño” es una farsa en la que un otrora bailarín se une a una buscavidas para sacar tajada del patrimonio de la mujer madura que paga sus caprichos. Llegados a este punto es cuando resulta muy evidente la referencia, en clave actualizada, de la magistral “El crepúsculo de los dioses”, en la que Isabelle Adjani retoma el rol de aquella olvidada estrella de cine mudo que legó para la posteridad Gloria Swanson.

En clave de thriller e incluso comedia negra, sobre todo en su tramo inicial, la película construye mediante flashbacks una historia en torno a la grisura del ser humano, personificada en los roles principales de Pierre Niney y Marine Vacth.