Felix Gall (AG2R) ganó ayer la etapa reina del Tour entre Saint-Gervais y Courchevel, de 165,7 kilómetros y 5.400 metros de desnivel, en la que Pello Bilbao fue tercero para colocarse sexto en la general a 49 segundos de la cuarta plaza. Jonas Vingegaard sentenció el Tour tras hundirse Pogacar en el col de la Loze y llegar a casi seis minutos del danés.

La emoción de la etapa estuvo en una escapada de 33 corredores, con Pello Bilbao como mejor colocado. Vio que el adversario que le seguía en la general, Simon Yates, buscaba la fuga con dos compañeros y estuvo atento. No solo entraron los dos, también otros cuatro de sus perseguidores: Gaudu, Gall, Martin y Pinot.

Coronaron la Cornet de Roselend con 1:37 a un primer grupo tirado por el Jumbo. UAE no buscó la batalla, con Pogacar tocado física y mentalmente tras una caída. Permitió al grupo cabecero llegar a tener más de tres minutos a 55 de meta y eso llevó a Ineos, con Omar Fraile y Castroviejo, y a Bora a trabajar por detrás para defender los puestos de Carlos Rodríguez y Hindley. En el col de la Loze Gall y Simon Yates fueron los más fuertes y Pello Bilbao aguantó a Vingegaard para superarlo en el repecho final y terminar tercero.

PELLO, ORGULLOSO

Pello Bilbao transmitía a GARA en meta que «siento orgullo por el Tour del equipo y por el mío. Hemos sido valientes, con la intención de mejorar mi puesto. Jack ha hecho un trabajo increíble. Cuando tienes una ayuda así es difícil no dar el 100% y he ido con toda la motivación. La última subida es una de las más duras que se pueden encontrar y, cuando ves que faltan 28 kilómetros, piensas por qué has elegido un deporte como este. Pero ha sido una gran alegría acabar tercero. Era difícil estar en la pelea por la etapa porque ha habido mejores escaladores que se adaptan mejor a la altura, pero hemos dado un paso adelante en la general».

Añadía que «la mejor opción era empezar con ventaja el último puerto y así se puede gestionar mejor el esfuerzo. He visto antes que cuando se ponen a tope es difícil seguir el ritmo de los favoritos, quería mantener un ritmo regular durante todo el día y en el final intentar seguir su rueda».

Pello Bilbao destacaba que «justo justo y haciendo un sprint impresionante he conseguido mantener la rueda de Vingegaard en la Loze, pero gracias a eso he tenido su ayuda para hacer los últimos cinco kilómetros más rápido. No me preocupa mucho el puesto final, creo que hacer cuarto o séptimo la gente lo va a valorar igual. Se valora la actitud, como hoy, corriendo adelante y buscando oportunidades. A mi cabeza no le va a cambiar mucho el puesto, solo terminar en el podio marcaría la diferencia, pero lo veo muy difícil en este momento».