GARA Euskal Herriko egunkaria
DE REOJO

Ritos religiosos ancestrales


Confieso que las imágenes del vestuario del Athletic Club antes de saltar a San Mamés rezando todos, jugadores, entrenadores y equipo de apoyo, un padre nuestro, me ha sorprendido por lo que este rito ancestral tiene de ideología excluyente. Entraron las cámaras con sus micrófonos con el consentimiento de todos los implicados, club y protagonistas de corto o en chándal y sabían que se iban a emitir, por lo que se trata de un vindicación de su catolicismo practicante. ¿O hablamos de otra cosa?

Es habitual ver a jugadores santiguarse u orar si no es católico antes del inicio de un partido o al conseguir un gol. Es una manifestación personal, pero que una entidad se entregue de esta manera a un rito religioso tan concreto no deja de ser una muestra de las contradicciones que vivimos en la difusión y consumo de estos productos populistas que intentan canalizar nociones identitarias de país, ciudad o colectivo social concreto. Un club de fútbol parece una institución trasversal, donde conviven diversas clases sociales con igual intensidad emocional, pero cuesta encajar este rezo previo, aunque sí forma parte del ritual de los clubes ofrecer al santo o santa de la localidad los triunfos, al igual que a las autoridades políticas electas.

De repente encadeno imágenes, los curas de club, como los de los cuarteles, que mantienen el espíritu al igual que en los hospitales y forman parte de la herencia recibida y no cuestionada. Los toreros, en todas las plazas, tienen una capilla para encomendarse a sus santos antes de hacer el paseíllo. No sigo que es la hora del rosario.